Kaká D'Avila es un concejal de Porto Alegre, Brasil, que se topó en el contenedor con una bolsa llena de folios. Pero, al revisar su contenido, vio que eran 62 currículums, por lo que rápidamente pensó que debía darles una utilidad.
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Kaká D'Avila es un concejal de Porto Alegre, Brasil, que se topó en el contenedor con una bolsa llena de folios. Pero, al revisar su contenido, vio que eran 62 currículums, por lo que rápidamente pensó que debía darles una utilidad.
"Hice lo que todos deberían hacer en esta situación. Detrás de cada hoja de papel hay una vida que merece respeto", expresó a los medios. El hombre quiso darle una segunda vida a estos papeles desechados, que probablemente correspondieran a personas rechazadas por una empresa.
"Es una falta de respeto a los desempleados. Recogí cada currículum arrugado y lo rehice todo. Y, para valorar cada uno de ellos, he creado esta 'joyero porta-currículums'. Y así es como voy a las empresas para repartirlos", escribió en un post de Instagram a finales de mayo en el que mostró las fotos de la basura y de su caja para transportar los papeles.
"¡Algunos incluso ya han sido contratados!", añadió. Y es que, tras dos semanas, ya son 14 las personas que han sido contratadas gracias a que Kaká D'Avila entregó los currículums en empresas con alguna vacante.