Argos, un perro adulto ovejero alemán, fue víctima de uno de los peores casos de abuso animal. Fue enterrado vivo entre medio de escombros cerca del río ubicado en Los Molinos, de San Salvador de Jujuy. El caso se dio a conocer ayer, cuando unos niños que se encontraban jugando al fútbol en una cancha ubicada en avenida La Gaceta, escucharon los aullidos del animal y se acercaron a comprobar el origen. Lo que vieron era difícil de creer: habían enterrado vivo a un perro, cubriéndolo de tierra, piedras y ramas hasta el cuello y dejando su cabeza a la intemperie.
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Argos, un perro adulto ovejero alemán, fue víctima de uno de los peores casos de abuso animal. Fue enterrado vivo entre medio de escombros cerca del río ubicado en Los Molinos, de San Salvador de Jujuy. El caso se dio a conocer ayer, cuando unos niños que se encontraban jugando al fútbol en una cancha ubicada en avenida La Gaceta, escucharon los aullidos del animal y se acercaron a comprobar el origen. Lo que vieron era difícil de creer: habían enterrado vivo a un perro, cubriéndolo de tierra, piedras y ramas hasta el cuello y dejando su cabeza a la intemperie.
Temiendo por su vida, los chicos comenzaron a retirar toda la tierra y escombros para acudir a su rescate. El animal, como bien lo muestra la imagen, presenta una mirada que refleja tristeza, dolor y sufrimiento. Y es obvio que quién o quiénes lo enterraron buscaban que muera de sed y hambre. Aunque no se sabe cuánto tiempo permaneció bajo tierra, este ovejero ahora presenta dificultad para poder caminar y su estado de salud es delicado.
Cómo continuó el rescate del animal
Ahora, Argos se encuentra en un domicilio transitorio bajo el cuidado de Sandra Barani, quien fue contactada por una vecina de la zona para poder ayudarlo. En diálogo con El Tribuno de Jujuy, señaló que le era imposible tenerlo, porque tiene a su cargo varios animales, pero ante la situación límite de este animal, no dudo en dirigirse al lugar donde se encontraba. “Es un perro enorme, está piel y hueso. Ha sido abandonado a su suerte por el hecho de ser viejo. Tiene todos sus dientes gastados. Estaba muerto de sed y deshidratado y con hipotermia. Cuando lo traje a casa lo puse junto a una estufa para que se caliente. Tiene una debilidad extrema” relató Sarina.
Por lo pronto se requiere colaboración para que reciba tratamiento. También una familia que lo adopte responsablemente y lo acompañe durante sus últimos años de vida. Se puede colaborar comunicándose al 3885 22-1070, también a través de CBU 0720150588000037351586. Titular: Sandra A. Barani.