La cuarta jornada del juicio por el homicidio de María Leonor Gine (70), ocurrido en marzo del año pasado en la provincia de Salta, continuó ayer con la declaración de médicos legales que realizaron informes sobre la autopsia realizada a la víctima. También comparecieron bioquímicos del Servicio Molecular Forense del CIF.
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La cuarta jornada del juicio por el homicidio de María Leonor Gine (70), ocurrido en marzo del año pasado en la provincia de Salta, continuó ayer con la declaración de médicos legales que realizaron informes sobre la autopsia realizada a la víctima. También comparecieron bioquímicos del Servicio Molecular Forense del CIF.
La audiencia comenzó con un planteo de la fiscal penal de la Unidad de Femicidios de Salta, Mónica Poma, quien solicitó agregar la calificación subsidiaria de encubrimiento agravado a la acusación formulada contra Federico Leonardo Detzel y Tania Rocío Aguirre.
Ambos llegaron al juicio acusados por homicidio agravado por ensañamiento, alevosía, criminis causa en perjuicio de María Leonor Gine, en concurso real con violación de las medidas dispuestas por la autoridad competente para impedir la propagación de una pandemia.
El tercer imputado en la causa es Agustín Morales, nieto de la víctima, por homicidio agravado por el vínculo, ensañamiento, alevosía, criminis causa y por haber mediado violencia de género, en perjuicio de María Leonor Gine, en concurso real con violación de medidas dispuestas por la autoridad competente para impedir la propagación de una pandemia.
Entre los peritos que presentaron sus informes ante el tribunal, estuvo la bioquímica del Servicio Molecular Forense que efectuó los hisopados de diversos elementos secuestrados en el departamento de la víctima, como cuchillos y prendas de vestir de Leonor Gine y de Agustín Morales. También declararon los médicos que elaboraron los informes sobre la autopsia realizada a la víctima y estaba prevista la comparecencia de un perito médico de la defensa de Detzel, un profesional del Servicio Médico del Poder Judicial y una médica del Servicio de Anatomía Patológica del CIF.
Sobre los hechos
El 28 de marzo de 2020, alrededor de las 10.30, una hija y un nieto de María Leonor Gine se acercaron al edificio donde residía la víctima, debido a que no respondía a las llamadas telefónicas. Por el portero del edificio se enteraron de que Agustín Morales, otro nieto de la víctima que residía con ella, había salido llevándose el vehículo de Gine.
Los familiares de la mujer de 70 años salieron en búsqueda de Morales y lo divisaron en avenida Bicentenario. Iba en el rodado acompañado por Detzel. Regresaron con Agustín al edificio de Gine y en ese momento arribó otra hija de la víctima, que tenía un juego de llaves del departamento. Al ingresar, encontraron el cuerpo de la mujer en la cocina. Tenía heridas en la cabeza, el cuello y otras de tipo defensivas.
A partir del relevamiento de filmaciones de las cámaras de seguridad se logró establecer que durante esa noche, Morales entró y salió varias veces del departamento de su abuela, acompañado por Detzel y Aguirre.
Cada vez más comprometido
Con la declaración de dos efectivos policiales, que intervinieron inicialmente en la investigación del crimen de María Leonor Giné (70) ocurrido el año pasado y comprometieron cada vez más al nieto.
Uno de los policías contó que cuando trasladaron a Morales a la División Homicidios vio a Detzel en la dependencia. El testigo narró que en ese momento el nieto de la víctima les preguntó qué hacía su amigo ahí. Les dijo que Detzel no tenía nada que ver y que él había matado a su abuela. El efectivo agregó que luego les comentó que él estaba con abstinencia, que necesitaba drogarse y que Giné no lo dejaba salir.
Brindó precisiones acerca de la declaración espontánea de Detzel. Dijo que el joven relató que Agustín lo había ido a buscar alrededor de las 3 en un remís, para que se drogaran. Se bajaron antes del vallado policial y caminaron hasta el edificio. Estuvieron en el living y Detzel les aseguró que en ningún momento vio a la abuela de su amigo. Solo escuchaba un televisor encendido. Luego fueron a una habitación a buscar dinero, porque Morales quería comprar más droga. Después de encontrar el fajo con billetes de 500 pesos, salieron en la camioneta de Giné.
En el camino pasaron por la “zona roja” e hicieron ascender al rodado a Aguirre. Con respecto a los dichos de Morales al momento de advertir la presencia de Detzel en la División Homicidios, el testigo refirió que el joven se alteró al ver a su amigo y que les dijo que él no tenía nada que ver y que, cuando lo buscó para drogarse, su abuela ya estaba muerta.