La toma de Kabul por parte de los talibanes trajo consigo una serie de imágenes simbólicas propias del retorno al poder después de 20 años, por ejemplo, la entrada al Palacio de Gobierno o la residencia presidencial.
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La toma de Kabul por parte de los talibanes trajo consigo una serie de imágenes simbólicas propias del retorno al poder después de 20 años, por ejemplo, la entrada al Palacio de Gobierno o la residencia presidencial.
Pero también se pudo ver otras situaciones más extrañas en donde los milicianos islámicos son protagonistas. En medio de ciudad casi vacía, con sus pobladores escapando a un lugar seguro fuera del rada del nuevo regimen, los fundamentalistas se apoderaron también de los espacios de entretenimiento pública.
Una de esas impactantes imágenes es la que se observa a los talibanes en una actitud infantil jugando en los autitos chocadores en lo que parece ser una plaza para niños y jóvenes. En otro tramo, también aparecen jugando en una suerte de carrousel.
"Parece que todo lo que querían eran paseos gratis en el parque temático", publicó el corresponsal internacional Shakib Noori, uno de los representantes de la prensa internacional que viene retratando todo el proceso de llegada de los talibanes a Kabul junto a Hamid Shalizi, corresponsal de Reuters y la periodista de la CNN que tuvo que cambiar su apariencia para evitar represalias.
Los talibanes regresaron al poder luego de 20 años de ocupación militar extranjera y avanzaron estrepitosamente tras la salida de las tropas de Estados Unidos anunciadas por Joe Biden en mayo.
En un mes, al menos 183 civiles, entre ellos niños, murieron en Lashkar Gah, Kandahar, Herat (oeste) y Kunduz, y cerca de 360.000 personas huyeron de sus hogares desde principios de 2021, según la ONU.