La Justicia jujeña dispuso que pase a archivo una acusación que pesaba sobre el expresidente del Superior Tribunal de Justicia de Jujuy Pablo Baca, por la supuesta autoría de abuso sexual con acceso carnal, en la causa iniciada a partir de la denuncia de Ana Juárez Orieta.
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La Justicia jujeña dispuso que pase a archivo una acusación que pesaba sobre el expresidente del Superior Tribunal de Justicia de Jujuy Pablo Baca, por la supuesta autoría de abuso sexual con acceso carnal, en la causa iniciada a partir de la denuncia de Ana Juárez Orieta.
La semana pasada el letrado fue notificado que la Justicia había dispuesto esta resolución y que la grave acusación que pesaba sobre él, quien renunció a su cargo en la Vocalía del Superior Tribunal de Justicia, para que la investigación no esté contaminada ni viciada.
Según las fuentes que fueron consultadas por nuestro diario, los fiscales de investigación penal que participaron en esta investigación tuvieron acceso a una serie de pericias psicológicas tanto de la denunciante como del denunciado, este último fue entrevistado por profesionales de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, porque al momento de la demanda penal, Baca ejercía su cargo de vocal del STJ.
En el inicio de la investigación el fiscal Gustavo Araya había solicitado el sobreseimiento del letrado, y la jueza de Violencia de Género Mónica Cruz Martínez solicitó que se realice una pericia al teléfono celular de la denunciante, pero ella nunca quiso hacer entrega del mismo.
Luego de la recepción testimonial de un testigo presentado por la querella, un nuevo fiscal de Cámara de un Tribunal en lo Criminal solicitó que se diera por concluida la investigación, por no tener sustento probatorio en cuanto a la acusación que pesaba sobre él.
En diálogo con nuestro diario, el letrado Pablo Baca dijo que "he sufrido un daño enorme, donde se afectó mi nombre y mi apellido, el que lleva mi padre y mi hijo. Además, esto afectó a los integrantes de mi familia, de alguna manera les llegó esta afrenta, he tenido que renunciar a mi cargo de jerarquía en el Superior Tribunal de Justicia".
"Otro daño que se hizo es que fui incluido en una antología que se iba a presentar en la Feria del Libro, una de las personas que estaba incluida se negó a presentarse si yo seguía figurando. Todo esto por una acusación injusta, he sufrido una especie de censura cultural", dijo.
Con todo esto, la grave acusación que pesaba sobre el letrado fue archivada por falta de elemento probatorio de investigación.
Respecto a los daños morales y pérdidas inconmensurables en las que se vio afectado, no descarta iniciar acciones legales en contra de la parte que lo perjudicó.