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El tapir, un mamífero terrestre considerado arquitecto del paisaje

Pariente del caballo y del rinoceronte, habita en las Yungas jujeñas y en los bosques chaqueños. Su estado es vulnerable
Jueves, 23 de septiembre de 2021 01:01

Con una anatomía muy particular, el tapir es un animal especial que habita en nuestra selva de Yungas y en los bosques chaqueños.

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Con una anatomía muy particular, el tapir es un animal especial que habita en nuestra selva de Yungas y en los bosques chaqueños.

Los ejemplares de esta especie -que es pariente del caballo y del rinoceronte- exponen a simple vista manchas blancas en líneas longitudinales al cuerpo que desaparecen a medida que crecen. Ya en la adultez, su color se vuelve grisáceo parduzco liso. Este animalito tiene una característica natural, se trata de una proboscis que le sirve para su alimentación.

"El tapir presenta un labio superior está como agrandado, formando una trompita que le sirve para la alimentación", expresó Eduardo Vargas desde el Centro de Atención de la Fauna Autóctona de Jujuy (Cafaju) perteneciente al Ministerio de Ambiente de la provincia.

RESCATADA DE UN CANAL / EL ESPECIALISTA JUNTO A LA PEQUEÑA TAPIR EN EL AGUA.

El singular ejemplar está considerado como el mamífero terrestre más pesado de Sudamérica, siempre hablando de animales autóctonos y silvestres. "Se cree que pueden llegar a pesar hasta 300 kilos las hembras que son un poquitito más pesadas que los machos", expresó el especialista quien detalló además que se trata de un animal herbívoro que se alimenta principalmente de hojas, frutas, brotes y tallos tiernos.

"Debido a su dieta especializada, se denominan frugívoros por la ingesta de frutas y folívoros por la ingesta de follaje de hojas", comentó.

El Tapirus terrestris -como es nombre científico- tiene una piel extremadamente dura. "Hay registros de que las comunidades indígenas los cazaban antiguamente y que con la piel hacían como escudos para las batallas y que con otra parte de la piel, hacían suelas para la sandalias", detalló.

PEDILUVIOS SANITARIOS / UN TRATAMIENTO PARA CURAR LAS PEZUÑAS LASTIMADAS

En la actualidad, está prohibida la caza de esta especie protegida por leyes nacionales y provinciales.

Por ello, es importante resaltar que el estado de conservación del tapir es vulnerable y que sólo habita en siete provincias en el país. "Antiguamente se lo encontraba en diez provincias, pero se extinguió en Tucumán, Corrientes y Entre Ríos. Hoy en día vive en casi todo el norte y centro de Argentina, pero está la población vulnerable, es decir, a un paso de estar en peligro de extinción que de hecho antes estaba en peligro pero ahora por mayor monitoreo, está en categoría de vulnerable", comentó Vargas especificando que esto se produce principalmente por la deforestación, la pérdida de hábitat, la fragmentación que sufre la especie y la caza ilegal que, si bien está prohibida, existe. Y es que el tapir está considerado el arquitecto del paisaje dentro de la biología por tener la capacidad de modificar los paisajes en donde vive. "Hace senderos, se trepa un poquitito a los árboles para comerse las hojas y las ramitas tiernas que están más abajo en las plantas y ahí se ve que va cambiando la fisonomía del paisaje y aparte es un gran distribuidor de semillas", contó. Al tapir le gusta la noche, es de espíritu crepuscular pero, principalmente, es solitario. "Las hembras entran en el período de estro -celo- en invierno y primavera, luego del apareamiento, cuando una hembra queda preñada tiene una gestación de trece a catorce meses y siempre va a nacer una sola cría, que permanecerá con la madre alrededor de un año o un año y medio hasta que se separan y se hacen solitarios", dijo.

"Se juntan únicamente para reproducirse y después vuelven a separarse. La cría mama hasta más o menos los seis meses de vida. Las crías cuando nacen son manchaditas", finalizó el especialista.

El rescate de una pequeña cría 

Desde Cafaju se rescató a una cría de tapir de un canal. La pequeña tenía las patas y pezuñas muy lastimadas. “Era una hembra que estaba bastante mal. La recuperación fue bastante complicada para curarle las pezuñas”, expresó Eduardo Vargas. 

Se encuentra en rehabilitación, en la reserva de Horco Molle en Tucumán. “A otra cría hubo que alimentarla con mamadera en un principio no tenía trauma. Rescatamos más tapires”, dijo el especialista que conoce en profundidad a esta especie. 

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