Desde 1992, la fundación "Sentir" abrió sus puertas a la comunidad para brindar un servicio especial.
inicia sesión o regístrate.
Desde 1992, la fundación "Sentir" abrió sus puertas a la comunidad para brindar un servicio especial.
Las buenas energías. Globos de colores, juegos y diversión a pleno fueron el marco más especial para llegar a la sonrisa de los niños.
Con un eslogan que la identifica plenamente, la institución realiza el abordaje de una tarea diaria en favor de las personas con discapacidad.
"Por una inclusión plena y feliz", es la frase que constantemente incentiva a los protagonistas de un eje fundamental en cada una de las prácticas que se brindan, a fin de lograr el bienestar emocional, la calidad de vida y el desarrollo de la autonomía de los niños, adolescentes, adultos y sus familias.
Así es que para agasajar a los más pequeños en su día, "Sentir" realizó distintas actividades en una jornada tan colorida como especial, y se visitió de gala para celebrar una fiesta en la que no faltaron juegos, música y regalos. "Los niños del servicio del CET aprenden contenidos como Ciencias Naturales o Tecnología, a leer y a escribir y a coordinar los movimientos de sus manos para realizar un dibujo o una actividad manual", expresó Fabiola Daz, referente de la institución, quien dejó ver que los chicos que disfrutaron de un momento compartido también aprenden a comunicar lo que desean con palabras, dibujos y gestos, siempre en un contexto estimulante y alegre, pero sobre todo feliz.
Mientras -aseguró- los jóvenes del servicio de aprestamiento laboral desarrollan habilidades de trabajo en diversos contextos, recreando situaciones reales de trabajo en esta oportunidad en el taller de cocina en un concurso para la mejor empanada, donde a través de una propuesta motivadora y creativa, pusieron en juego capacidades y herramientas para una futura inserción laboral.
Es importante recordar que "Sentir" es una entidad que está conformada por equipos interdisciplinarios especializados en el abordaje integral de las personas con trastorno del espectro autista, trastornos de comunicación, conducta, aprendizaje y discapacidad intelectual.
"Creemos que las personas con discapacidad tienen derecho a tener una vida feliz y de calidad. Cada uno de los centros dependientes de la fundación construimos día a día propuestas educativas y terapéuticas, mirando a la persona desde sus posibilidades, intereses y motivaciones", reflexionó Daz.
De esta manera, se generan espacios y oportunidades de inclusión social que les permite abrir todo un potencial y el valioso aporte que pueden ofrecer a la sociedad.
En este contexto, se desarrollan las propuestas educativas, se elaboran dispositivos de apoyo en la familia, en la escuela, en el barrio, en el club, en todos los espacios que frecuentan las personas con discapacidad, se crean programas de enseñanza y de intervenciones terapéuticas individuales y específicas.
"Muchos de los programas, modalidades de intervención, formas de enseñar e ideas surgen a partir de propuestas lúdicas adecuadas a las posibilidades de cada uno de los concurrentes", expresó Daz, todo esto considerando la diversidad de cada individuo.