La resiliencia a partir del amor y con el arte como vía, es sin dudas sanadora y trae felicidad al artista plástico Juan José Molina, que hoy a las 20 inaugurará su muestra "Dinos en la Puna", en homenaje a su nieto Benjamín, en el Centro Cultural y Museo Casa "Macedonio Graz" (Lamadrid esquina Güemes).
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La resiliencia a partir del amor y con el arte como vía, es sin dudas sanadora y trae felicidad al artista plástico Juan José Molina, que hoy a las 20 inaugurará su muestra "Dinos en la Puna", en homenaje a su nieto Benjamín, en el Centro Cultural y Museo Casa "Macedonio Graz" (Lamadrid esquina Güemes).
Benjamín hoy tendría dieciséis años, pero se despidió de este plano de la vida, cuando sólo tenía nueve años, a causa de una enfermedad que lo puso a luchar en su infancia, pero que no pudo vencer. Ese momento fue hace siete años, y él era su único nieto.
Esta muestra cuenta con ocho cuadros de gran porte, que unen lo que a simple vista parecería impensable, el mundo mágico de los paisajes y personajes norteños tan característicos del estilo de este artista con gran trayectoria, a quien lo distingue la tonalidad y la perspectiva; y el mundo imaginario de Benjamín, quien dibujaba muy bien, según cuenta su abuelo, y amaba los dinosaurios y su historia y éstos eran motivos de sus innumerables dibujos. Por eso el título de esta muestra, "Dinos en la Puna".
Benjamín convivía con los procesos creativos de su abuelo, creció en su atelier, observándolo, y dibujando, pero su propia inspiración. Y dejó libros hechos por él, con dibujos y textos, y todo lo que interesaba de estos animales que lo fascinaban.
Siete años le llevaron a Juan José Molina encontrar el momento y la forma de tenerlo presente sin dolor y desde el mejor recuerdo.
"Es una muestra de fusión entre lo que hacía mi nieto, que fue un gran dibujante, y lo que hago yo", explica el artista de larga trayectoria en nuestra provincia y de proyección nacional. "Decidí hacer una muestra en homenaje a él, son cuadros grandes de obras mías, que tienen en algunas partes los trabajos de él. He mezclado un poco los dos mundos", dice en conversación con nuestro medio.
Los impensable entonces tiene respuesta cuando le preguntamos cómo se logró. "Esto es puro corazón y puro amor", dice el abuelo artista. "Logramos ensamblar la obra de él y la mía, por eso la muestra es Molina-Molina", comenta orgulloso.
Preparar esta muestra le llevó casi un año de trabajo.
"Es una obra muy exquisita, aunque quizás a algunos les choque ver en medio de mis personajes, los dinosaurios. Pero de eso se trata. Él dejó una gran cantidad de dibujos y pinturas, y fuimos seleccionando con mi hija Paula, mamá de Benjamín ". Sin dudas iba por el camino de su abuelo, su gran referente, y entonces Juan Molina expresa "estaba convencido que él tomaría el banderín, pero el destino quiso otra cosa".
Esta muestra se inaugura a unos días de un aniversario más de su partida, ya que el sábado se cumplen los siete años.
Talleres
A esta muestra que estará disponible para el público hasta el 31 de este mes, se le sumarán talleres de arte para niños, que el artista dictará con su esposa, Rosa del Carmen Rojas, licenciada en Letras, en las instalaciones de "Macedonio Graz".
Serán talleres de lectura y de arte, donde a partir de un cuento, se motive a los niños para pintar y hacer su propia obra.
Rosa del Carmen Rojas se dedica especialmente a los cuentacuentos, y formó un Centro de Literatura para Niños que funciona de manera virtual, CeLiJu, con el que hizo presentaciones en la reciente Feria del Libro de Jujuy.