“Este día me recuerda muchas cosas, la primera, cuando después de 18 años de exilio, una día destemplado y lluvioso, el General Juan Domingo Perón, aparecía en la puerta del avión que lo traía de vuelta a su país. Recuerdo también, como un símbolo, que a su lado, intentando protegerlo del aguacero con un paraguas, estaba el secretario general de la CGT, compañero José Ignacio Rucci, sinónimo de lealtad y de militancia. Ese día, un 17 de noviembre de 1972, el país recibía con alegría el regreso del fundador del Justicialismo, un líder quien la llamada revolución libertadora, y que los peronistas conocemos como la ‘fusiladora’, quiso borrar el mapa y sólo consiguió agigantar su figura”, expresó el presidente del Partido Justicialista distrito Jujuy, diputado Rubén Armando Rivarola.
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“Este día me recuerda muchas cosas, la primera, cuando después de 18 años de exilio, una día destemplado y lluvioso, el General Juan Domingo Perón, aparecía en la puerta del avión que lo traía de vuelta a su país. Recuerdo también, como un símbolo, que a su lado, intentando protegerlo del aguacero con un paraguas, estaba el secretario general de la CGT, compañero José Ignacio Rucci, sinónimo de lealtad y de militancia. Ese día, un 17 de noviembre de 1972, el país recibía con alegría el regreso del fundador del Justicialismo, un líder quien la llamada revolución libertadora, y que los peronistas conocemos como la ‘fusiladora’, quiso borrar el mapa y sólo consiguió agigantar su figura”, expresó el presidente del Partido Justicialista distrito Jujuy, diputado Rubén Armando Rivarola.
Y continuó: “Los recuerdos me traen al presente el desafío que el dictador de ese momento, el general Agustín Lanusse, había lanzado semanas atrás, cuando dijo que Perón no se animaba a retornar al país, porque no le daba el cuero. Hoy, los peronistas de Jujuy y de todo el país, en nombre del General, estamos dispuestos a ratificar que siempre ‘nos dará el cuero’, que a pesar de las adversidades, siempre estaremos dispuestos a luchar para volver a ser Gobierno nacional y provincial, porque ése es el mandato que Juan Perón nos dejó prendido en el corazón”, enfatizó.
En otro momento, Rivarola se dirigió a la militancia del PJ. “Debo decir que el regreso de Perón se debió a su tesón y a su vocación de servicio al pueblo, pero quizás no hubiese sido posible, si detrás de él, no hubiesen estado, en todo momento, los militantes peronistas, hombres y mujeres que nunca bajaron las banderas, a pesar de la discriminación, la persecución, la cárcel y hasta de la muerte. Esa militancia es la que hoy debemos honrar con alegría y con orgullo. Especialmente ahora que nos aquejan las divisiones.
El peronismo es un movimiento que se nutre de muchas vertientes ideológicas y de muchas corrientes de opinión, pero con el objetivo común de hacer la felicidad del pueblo y la grandeza de la Nación. Por eso, hoy, más que nunca, debemos comprender que la meta en el Justicialismo es buscar la unidad, con respeto y con voluntad de servir. No construiremos ni militancia ni victorias apostando a dividir al peronismo. Siempre recuerdo la enseñanza del general: ‘cuando un peronista comienza a hablar mal de los compañeros, es que se está pasando al bando contrario’. Hoy quiero abrazar a todos los compañeros y compañeras y desearles un feliz día de la militancia”, concluyó Rivarola.