Hay un proyecto que está sonando desde hace un tiempo largo, pero formalmente desde hace un año, allá por Purmamarca, pero sabiendo que es un lugar neurálgico donde se unen culturas y aspiraciones de todo el mundo. Se llama Zambazul, y nació con el firme objetivo de hacer buena música para el formato de peñas y cenas show, destinado sobre todo a los turistas habituales de la bella Purmamarca, pero con la raíz que lo habilita a ser locales en Jujuy, en Argentina y en el mundo.
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Hay un proyecto que está sonando desde hace un tiempo largo, pero formalmente desde hace un año, allá por Purmamarca, pero sabiendo que es un lugar neurálgico donde se unen culturas y aspiraciones de todo el mundo. Se llama Zambazul, y nació con el firme objetivo de hacer buena música para el formato de peñas y cenas show, destinado sobre todo a los turistas habituales de la bella Purmamarca, pero con la raíz que lo habilita a ser locales en Jujuy, en Argentina y en el mundo.
Conversamos con Erik Díaz, voz y guitarra de Zambazul, porque hoy protagonizarán un evento desde las 13 en el Patio de Don Tomás, en Purmamarca, el espacio que les es más usual, casi su casa.
Zambazul se completa con Darío Cazón en vientos andinos y percusión; y Leonardo Di tata, en bajo eléctrico.
La propuesta es un encuentro con buena comida, pista de baile, micrófono abierto, y música y danza en vivo. Se suman a Zambazul, Dani García y Las Venus del Monte, además de Daniela Longo en danza, malambo y boleadoras, entre otros artistas que se irán sumando espontáneamente.
Recientemente, hicieron su primera presentación en una sala, con el formato de un teatro, y el lugar elegido fue el centro cultural "Héctor Tizón".
Y Erik explica que la base de este proyecto que le pone mucha atención a la calidad musical e instrumental, sigue siendo en ámbito gastronómico, puesto que Zambazul se gestó como un proyecto laboral específico.
Sus integrantes son oriundos de distintos lugares del país, y por eso el estilo es la fusión de folclore y música latinoamericana.
"La banda en sí viene trabajando de antes, con distintos integrantes. La intención siempre fue formar un equipo de trabajo para eventos o situación de peña, o cena show, siempre con el estilo del folclore argentino y la música latinoamericana", comienza explicando Erik.
"Antes de Darío por ejemplo había otro vientista -cuenta-; cuando llegué a Purmamarca, el primer encuentro fue con Leo, luego se sumaron un vientista y un violinista, y finalmente, hace un año más o menos se integra Darío, pero lo que define a la banda básicamente es el repertorio y los arreglos", explica el músico.
A la hora de buscar una definición, dice que "Zambazul es un conjunto de fusión de ritmos latinoamericanos con sede en Purmamarca, actualmente operamos desde ahí, y cada tanto actuamos en San Salvador de Jujuy".
"Somos guitarra, vientos andinos, percusión, bajo eléctrico, zamba, chacarera, bailecito, cuecas, composiciones de (Ricardo) Vilca y Uña Ramos y algunas propias", cuenta.
Sus presentaciones se nutren con bailarines y otros artistas, y eso le da un condimento especial.
"Siempre pensamos en la musicalidad de lo que hacemos, lo mismo que en el contacto con el público, generando un diálogo con las personas", asegura, y queda muy claro que es un proyecto de trabajo, y que las presentaciones en teatro serán esporádicas.
Desde el lado creativo, explica que les gusta componer, pero no es la mayor parte de su repertorio lo de los temas propios, por lo menos por ahora, "porque somos cuidadosos, a la hora de componer, y queremos que ese sea el fuerte nuestro en un futuro", asegura.
Tienen tres videos ya publicados en Youtube, y uno a punto de salir. Uno es "Camino de llamas" de Uña Ramos, filmado en vivo para tener una muestra de lo que hacen; "Como el aire", un taquirari de propia autoría; "Quebrada arriba", una zamba jujeña que hicieron con arreglos propios; y "A ojos cerrados", un huayno de composición propia.
Influencias de los lugares
Al hablar de música latinoamericana, la pregunta es ¿qué pesa más en el repertorio de Zambazul?, teniendo en cuenta que todos sus integrantes tiene orígenes diferentes.
"Yo viajé durante varios años por distintos países, siempre con la guitarra y tomando clases. Entonces vemos un factor común cultural y musical entre todos esos países -explica-, entonces siempre sentimos que estamos haciendo lo nuestro". Es como que se sienten en casa en cualquier lugar.
Sin embargo, la modalidad es "explorar en todos esos ritmos, sumándolos al bagaje de lo que conocimos y lo que vamos conociendo", expresa Erik.
"Obviamente el contexto peña y donde tocamos va a ameritar que exploremos en ritmos locales, eso es la base y usamos lo demás para rellenar y hacer el soporte del repertorio", continuó.
"Siempre la idea es fortalecer y darle una identidad a lo que hacemos, porque algunos no somos jujeños. Buscamos un sello identitario más global", comenta.
Entonces la siguiente pregunta es si Zambazul se piensa en otro lugar que no sea Purmamarca, y Erik lo aclara: "Por el momento lo pensamos en Jujuy, pero como trabajamos con turismo y acá llega gente de todo el mundo, donde estamos nos pueden encontrar, y ver la esencia que nos mueve. Zambazul en Purmamarca está apuntado a ese turismo. Cuando salimos de ahí, sí estamos más apuntados a lo provincial".
Con el tiempo, la intención es "forjar una banda con sustento más popular", concluye.