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El merendero "A Pulmón" cumplió cinco años de labor constante para los niños del barrio Malvinas. No obstante, en este espacio siempre son necesarios elementos de higiene como detergente, esponjas y alcohol en spray, entre otros elementos. "Hay que buscar la manera de salir adelante, por ejemplo, en mi caso vendo sandwiches de miga o bizcochuelos, que lo preparo el día anterior y salgo a vender a la calle para ayudar con los gastos del merendero", explicó Delia Vargas, referente de la entidad sin fines de lucro que inició el año con lo justo en cuanto al servicio solidario que ofrece.
"Recibimos ayuda hasta diciembre del año pasado, pero lo que fue enero, febrero y lo que va de marzo es muy poca; por eso nosotros seguimos con la reserva desde diciembre, siempre hacemos un acopio que no cubre todas las necesidades, pero aun así podemos hacer la merienda", comentó. En tanto, con referencia al tema del pan, Vargas afirmó que desde noviembre del año pasado, no se reparte pan a los chicos porque no hay fondos para pagarlo.
"Todo lo que estamos haciendo ahora como un trabajo a la mañana es para abastecer lo que se refiere a alcohol, detergente y esponjas, para mantener la higiene. Por ejemplo, nosotros usamos doce kilos por día de azúcar. Ahora ya no tenemos, hasta nuestro cumpleaños fue con muy poquito azúcar", expresó Vargas con respecto a la situación actual del merendero que continúa abriendo sus puertas de lunes a viernes.
"Por ahora estamos brindando mate y té, algunos que otros días hay un señor que nos acerca leche y la preparamos con chocolate, pero no siempre es así", comentó.
Asimismo, más actividades se efectúan en este espacio donde se resalta la atención y consulta de los pequeños con el oftalmólogo Luis Marto. "El doctor está atendiendo a los niños todos los días jueves, casi siempre son tres niños y un adulto o persona mayor que van a control, también estamos haciendo electrocardiogramas para los chicos a 600 pesos que es lo mínimo.
Tratamos de hacer estas consultas en un día especial", detalló Vargas. El profesional oftalmólogo realiza la revisión ocular de los niños desde el año pasado y les otorga la receta de los anteojos para ayudarlos a que vean mejor. "Muchos niños tienen dificultades en la visión por la pantalla del celular", contó Vargas. Asimismo, las puertas de "A Pulmón" se abren siempre para todos los aquellos que quieran colaborar como voluntarios o quienes estén dispuestos para ser parte de esta gran familia. "Durante estos años en el merendero, siempre hay actividad.
En este último tiempo, algunas que otras personas vienen y nos donan pancito porque saben de la situación. Nosotros siempre estamos pidiendo la colaboración para este trabajo solidario que es sostenido por la gente", expresó la referente que se encarga personalmente de la difusión de las necesidades del espacio, por los medios de comunicación en la provincia. "Por los niños vamos a seguir tocando puertas, buscando por medio de notas a instituciones porque no podemos solos", aseguró.