"Nada grande se puede hacer con la tristeza" es la frase de Arturo Jauretche que motiva las ganas de vivir a Patricia Oviedo, una jujeña que explora nuevos horizontes para su perfeccionamiento profesional en Brasil.
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"Nada grande se puede hacer con la tristeza" es la frase de Arturo Jauretche que motiva las ganas de vivir a Patricia Oviedo, una jujeña que explora nuevos horizontes para su perfeccionamiento profesional en Brasil.
Pero no se trata de cualquier lugar, sino en la espectacular Meia Praia, Itapema, famosa por sus playas y montañas ubicadas en la paradisíaca Santa Catarina, uno de los lugares más atractivos del país vecino.
El encanto por este maravilloso paisaje se originó gracias a unas vacaciones que en el año 2013, fueron más que suficientes para la especialista en portugués, Turismo y Hotelería, ya que disfrutó de este lugar que necesitaba personal en diferentes áreas turísticas.
"Mandé currículums a todos lados en Jujuy y también por este lado, mi currículum llegó a la dueña de la posada", expresó Oviedo quien en la actualidad, se desenvuelve en recepción y administración de una posada reconocida de la zona.
"Me aceptaron por correo y fue una locura porque sin conocernos, llegué a la estación terminal de Itapema, trabajé unos tres meses, volví a la Argentina y al año siguiente, otra vez pero ya con mi hija mayor que tuvo la posibilidad de trabajar aquí", relató Oviedo sin olvidar de resaltar la importancia de saber portugués que fue, sin dudas, la gran puerta que le abrió las posibilidades de trabajo.
Los años fueron pasando y la relación laboral con los administradores de la posada pasó a ser una amistad muy bonita. "Francisco Xico y Erotides visitaron Jujuy y quedaron fascinados con el paisaje de cerros. Él es licenciado en Geografía y nunca imaginó que los paisajes que había enseñado en sus clases tenían los colores y las formas que pudo ver en Jujuy. Se emocionó mucho, tuvieron la suerte de ver nieve y para ellos fue como una vuelta a la infancia, a jugar", comentó.
Hoy por hoy, los lazos afectivos entre ellos son notables. "La verdad que la relación afectiva que se fue construyendo es emocionante, voy a estar agradecida toda la vida", indicó Oviedo.
Rodeada de mar, playa y montaña, eligió perfeccionarse en su carrera a fin de sentirse plena en un lugar donde puede trabajar de su profesión y brindar una buena calidad de vida a sus hijos.
"Aquí es muy estacional y al igual que en Jujuy, los meses fuertes son en verano y ahora lo que se viene es Semana Santa. Luego el invierno hace mucho frío, porque es el sur de Brasil", contó, enamorada de la generosidad y hospitalidad de los brasileños.
"Siempre están dispuestos a ayudar", dijo con alegría, acaso contagiada por la energía que la rodea permanentemente. "Es lo que necesitamos para comenzar de nuevo en esta vida", reflexionó.
Así es como esta jujeña fue incentivada por sus tres hijos, quienes fueron los verdaderos motivadores para realizar este viaje desde el primer momento.
"No me afecta el sentido de la distancia porque estoy en contacto con mi gente a través de las redes y aquí tenemos afectos que son muy importantes. Brasil me cautivó pero no olvido mi raíz jujeña. Siempre la llevo presente", explicó Patricia.
"Yo amo mi país y mi lugar en el mundo es Jujuy, pero Brasil me brinda los recursos necesarios para progresar junto a mis seres queridos", finalizó orgullosa de su logro.