Tras la detección del reciente caso de sarampión en una mujer residente en la Ciudad de Buenos Aires, con antecedente de viaje al exterior, El Tribuno de Jujuy consultó al infectólogo Gustavo Echenique sobre el origen de esta enfermedad y los cuidados a tener en cuenta. De entrada, el especialista llevó tranquilidad a las personas indicando que se trata de un caso importado y señaló que la mejor forma de evitar su transmisión es la vacunación, que dicho sea de paso está incluida en el Calendario Nacional.
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Tras la detección del reciente caso de sarampión en una mujer residente en la Ciudad de Buenos Aires, con antecedente de viaje al exterior, El Tribuno de Jujuy consultó al infectólogo Gustavo Echenique sobre el origen de esta enfermedad y los cuidados a tener en cuenta. De entrada, el especialista llevó tranquilidad a las personas indicando que se trata de un caso importado y señaló que la mejor forma de evitar su transmisión es la vacunación, que dicho sea de paso está incluida en el Calendario Nacional.
En este contexto recordó que el país está libre de sarampión desde el año 2000, pero que desde esa fecha se han registrado casos relacionados con la importación.
En el caso de Jujuy, se sabe que desde hace 25 años no se registra ningún caso autóctono y que las dosis para prevenirla están disponibles para toda la provincia.
Respecto al caso importado en Buenos Aires, dijo que se trata de una paciente con 9 semanas de embarazo que venía de otros países y que afortunadamente evoluciona muy bien.
Los síntomas
El infectólogo dijo que el sarampión es una enfermedad infectocontagiosa que se transmite a través de gotículas procedentes de la nariz, boca y faringe de las personas infectadas. Los síntomas suelen ser fiebre, encefalitis, dolor de cabeza, dolor de cuerpo, neumonía, lesiones rojizas en la piel y que inclusive pueden cicatrizar la mucosa bucal. Ante la aparición de cualquiera de estos síntomas, aconsejó acudir al hospital o centro de salud más cercano.
Covid y sarampión
Por otro lado, señaló que a nivel mundial ha habido una disminución de la vacunación contra el sarampión, fundamentalmente en los últimos dos años a causa de la pandemia, debido a que se han priorizado otras enfermedades.
En tal sentido señaló que se la comparaba a la variante Ómicron Sars-Cov-2 con sarampión, por su alta contagiosidad.
Además, dijo que si bien la vacuna contra el sarampión está incluida en el Calendario Nacional, en caso de que la persona realice un viaje al exterior, deberá primero asesorarse con el médico de cabecera. "Es para determinar si esta persona tiene o no anticuerpos, y si no tiene, se puede perfectamente indicar las vacunas. Es para todas las personas que están con necesidad de viajar, no solo por sarampión, sino por otras enfermedades que uno pueda tener en el lugar del destino. Y más aún si la persona tiene comorbilidades", cerró.
Esquemas de inmunización
El Ministerio de Salud de la Provincia indicó que en virtud de la situación epidemiológica nacional respecto al sarampión es clave verificar y completar esquemas de vacunación tanto en edad pediátrica como adulta concurriendo al Caps más cercano al domicilio.
De acuerdo con el Calendario Nacional de Vacunación, las dosis obligatorias contra esta enfermedad para la franja de 12 meses a 4 años, deben tener una dosis de vacuna triple viral; mayores de 5 años, adolescentes y personas adultas nacidas después de 1965, deben acreditar al menos dos dosis de vacuna con componente contra el sarampión aplicada después del año de vida (doble o triple viral) o contar con serología IgG positiva para sarampión. En tanto que las personas nacidas antes de 1965 se consideran inmunes y no necesitan vacunarse.
En el caso de residentes de Argentina que viajen al exterior, niños y niñas de 6 a 11 meses de vida, deben recibir una dosis de vacuna doble viral o triple viral (“dosis cero”). Esta dosis no cuenta como esquema de vacunación de calendario.
Para niños de 12 meses, deben recibir una dosis correspondiente al calendario, de 13 meses a 4 años inclusive, deben acreditar al menos dos dosis de vacuna triple viral; mayores de 5 años, adolescentes y personas adultas deben acreditar al menos dos dosis de vacuna con componente contra el sarampión (monovalente, doble o triple viral) aplicada después del año de vida o confirmar a través de un estudio de laboratorio la presencia de anticuerpos contra sarampión.
Las personas nacidas antes de 1965 son consideradas inmunes y no deben vacunarse. Cabe mencionar que la vacuna doble o triple viral está contraindicada en menores de 6 meses, personas gestantes y con inmunosupresión.