Hoy a las 11.30, en el Patio del Rectorado de la Unju (Universidad Nacional de Jujuy), ubicado en avenida Bolivia 1239, se presentará "Cara i luna".
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Hoy a las 11.30, en el Patio del Rectorado de la Unju (Universidad Nacional de Jujuy), ubicado en avenida Bolivia 1239, se presentará "Cara i luna".
Se trata de una obra performática, de creación colectiva, y la puesta se hace en el marco de la Kermesse por el Día de la Salud de las Mujeres, que se desarrolla hoy desde las 10, organizada por la ONG Juanita Moro, con el apoyo del Fondo de Mujeres del Sur.
Esta puesta está a cargo del elenco concertado Conjunto Salmón, integrado por las actrices Silvia Gallegos, Vanesa Vasquez, Tania Quipildor y Maria Galan, con dirección de Renata Kulemeyer. Todas son autoras de este trabajo pensado para espacios abiertos y comunitarios.
La sinopsis dice: "La mujer ciudad recibe, contiene y denuncia múltiples historias y sensaciones. Colores y costumbres acompañan a la viajera, aromas y semillas se mezclan en manos de la curandera, la mujer que gesta, que cría, que trabaja metamorfosea sus sueños y objetos.
HOY SE REPONE | “CARA I LUNA” EN EL PATIO DEL RECTORADO DE LA UNJU.
Una ventana desde donde se ve el barrio. La casa habitada por risas y juegos, también puede reclamar memoria. Las mujeres están aquí, tienen un nombre, vibran la tierra y son parte de ella. Listas de nombres, objetos y colores, hilos que traman y sostienen la historia. Las actrices reclaman por las que ya no están".
La puesta está hecha exclusivamente por mujeres. El equipo se completa con el arte en objetos, utilería y vestuario de Laura Vaquer; el diseño y técnica de sonido y luces de Daniela Defín; y la asistencia técnica de Fabiola Alancay.
Habitar la liminalidad que nos acontece, esa línea fronteriza que nos hermana con Bolivia y la trascendencia de nuestras genealogías, nuestros colores de piel, las huellas del colonialismo y el patriarcado, son nuestras historias de resistencia, de lucha, de transformación. Sobre esto habla esta obra.
Se cuestiona ¿de dónde venimos? ¿Qué historia queremos contar? ¿Quiénes cuentan estas historias? ¿Cuáles son las decisiones estético políticas que debemos tomar? Desandar, deconstruir los relatos, deconstruirnos y crear nuevas dramaturgias como un collage formado de pedacitos de cada una.
"Somos una grupa concertada que inició un recorrido en el 2010 bajo el nombre ´Conjunto Salmón´ un poco por ir contra la corriente y otro poco parodiando el conjuntito rosa, rosadito, naranja, anaranjadito, salmón con el que nos solían etiquetar a las ´niñas´", explica esta compañía.
Hace 12 años que vienen sosteniendo este espacio de encuentro.
Explican que trabajan en una "dramaturgia de mujeres, dramaturgia del espacio, son nuestras palabras las que están escritas en el guion, nuestras vivencias, nuestras imágenes, nuestras penas, nuestras muertas. La escritura collage, es esta que nos convoca a ser actrices-autoras. Es este el dispositivo que encontramos para abandonar la linealidad que gobierna en los textos, romper la autoridad preestablecida sobre la regencia de una única mirada autoral", manifiestan las artistas.
Sobre la propuesta de trabajar obras que se puedan presentar en espacios comunitarios, abiertos, tiene que ver con que "los límites que definen el espacio no son necesariamente barreras físicas, son sugerencias visuales que pueden ser líneas en el piso, fondo, arriba, abajo; en fin, los límites no son lo importante sino el vacío que encierran. Las habitantes del espacio transforman con sus acciones una atmósfera", aseguran.