El barrio La Merced de la ciudad siderúrgica vivió sus fiestas patronales con gran devoción y fe. Los feligreses compartieron el domingo la misa en la capilla del barrio con la participación de vecinos, feligreses y una activa comunidad unida.
inicia sesión o regístrate.
El barrio La Merced de la ciudad siderúrgica vivió sus fiestas patronales con gran devoción y fe. Los feligreses compartieron el domingo la misa en la capilla del barrio con la participación de vecinos, feligreses y una activa comunidad unida.
Las actividades dieron inicio hace nueve días con el rezo de la novena finalizando el día domingo con las actividades que se centraron en una procesión por las calles del barrio y la posterior misa y eucaristía en el día central de la celebración.
Como todos los años la celebración se cumplió por una posterior serenata, una actividad tradicional que mantienen los vecinos del lugar.
El presidente del centro vecinal, Maximiliano Puca, señaló a El Tribuno de Jujuy que "acompañé junto al vecino en la misa en honor a nuestra santa patrona. Esperamos con fe a nuestro barrio y pudimos poner en valor nuevamente la gruta para que siga siendo un espacio de encuentro y oración para los vecinos", dijo.
Santos Arnoldo y José
Desde la capilla Los Santos Arnoldo y José señalaron que "nos preparamos para celebrar un año más del aniversario de la canonización de San Arnoldo Janssen y San José Freinademetz. La novena se inició ayer y se extenderá hasta el 4 de octubre en la capilla Los Santos Arnoldo y José del barrio Sarmiento de Palpalá.
Está programada para las 19 la animación y a las 19.30 la celebración de la misa presidida por sacerdotes invitados.
El 19 de octubre de 1975, Arnoldo Janssen fue beatificado por el papa Pablo VI, junto al primer misionero enviado a China, el padre Freinademetz.
El 5 de octubre de 2003, en una multitudinaria ceremonia efectuada en la plaza de San Pedro, el papa Juan Pablo II canonizó a Arnoldo Janssen, fundador de los Misioneros del Verbo Divino, de las Siervas del Espíritu Santo y de las Siervas del Espíritu Santo de la Adoración Perpetua; y a José Freinademetz, primer misionero verbita en China. Como atributo de San Arnoldo Janssen, el papa expresó en aquel momento que "en su actividad sacerdotal mostró gran celo por la difusión de la palabra de Dios, utilizando los nuevos medios de comunicación social, especialmente la prensa". Sobre José Freinademetz dijo que fue "modelo ejemplar de inculturación evangélica".