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Gobierno de Puno decretó toque de queda por 3 días

Dispuso, además, tres días de duelo en toda su jurisdicción. Los muertos ascendieron ayer a 18. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos visitará el país entre mañana y el viernes.

Miércoles, 11 de enero de 2023 01:03

El Gobierno de Perú dispuso el toque de queda en la zona andina de Puno, en el sur, zona convertida en epicentro de violentas protestas contra la presidenta Dina Boluarte, que dejaron ya 18 muertos en dos días por los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes.

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El Gobierno de Perú dispuso el toque de queda en la zona andina de Puno, en el sur, zona convertida en epicentro de violentas protestas contra la presidenta Dina Boluarte, que dejaron ya 18 muertos en dos días por los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes.

“Se ha aprobado en el Consejo de Ministros un decreto supremo que declara inmovilización social en Puno por el plazo de tres días, desde las 20 hasta las 4 de la mañana”, anunció el jefe de Gabinete, Alberto Otárola ante el pleno del Congreso. La cifra de víctimas fatales fue aumentando y aunque el último informe de la Defensoría del Pueblo habló de 17 muertos, el número llegó a 18 con la confirmación de que también murió un policía, cuyo cuerpo calcinado fue encontrado hoy en la urbanización Tambopata.

“Lo que está pasando es una matanza entre peruanos, les pido calma, no se expongan”, exclamó el alcalde de Juliaca, Oscar Cáceres, en un llamado desesperado a la población a través de la radio La Decana de esa localidad. Además el gobierno regional de Puno, fronterizo con Bolivia, decretó tres días de duelo en toda su jurisdicción “en razón a los trágicos sucesos ocurridos en la provincia de San Román”, donde se encuentra Juliaca, para “aunarse al dolor de las familias dolientes y solidarizándonos con la población afectada”, señala un decreto publicado con la firma del gobernador Richard Hancco Soncco.

Perú vive una ola de protestas en gran parte del país desde el 7 de diciembre pasado, cuando Boluarte asumió el poder luego de que el Congreso destituyera al presidente Pedro Castillo, horas después de que el entonces mandatario anunciara la disolución del parlamento y el establecimiento de un gobierno excepcional con supresión de garantías. Esas protestas, que tuvieron una pausa por las fiestas de fin de año y se reanudaron el miércoles pasado, dejaron alrededor de 40 muertos, según datos oficiales.

Las violentas acciones del lunes se registraron cuando unas 2.000 personas intentaron tomar por asalto el aeropuerto de la ciudad de Juliaca, al sur de Lima. “Hoy (por ayer), más de 9.000 personas se aproximaron al aeropuerto de Juliaca y aproximadamente 2.000 de estas iniciaron un ataque sin cuartel contra la policía y las instalaciones, utilizando armas hechizas (armas improvisadas) y con doble carga de pólvora, generando una situación extrema”, dijo a la prensa el jefe de gabinete Alberto Otárola. El aeródromo está bajo resguardo policial y militar. Un intento de toma similar había ocurrido el sábado, pero sin muertes. “Los señores policías nos estaban disparando (...) pedimos que la señora Dina (Boluarte) renuncie (...) acepta que el pueblo no te quiere”, dijo un manifestante.

La Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas (Sutran) informó en su perfil de Twitter que 53 puntos en seis regiones del país se encuentran con tránsito interrumpido. La mayoría de los bloqueos se producen en Puno y entre los puntos bloqueados está la autopista hacia Desaguadero, uno de los pasos principales de comunicación con Bolivia. Aunque se considera de izquierda, Boluarte es vista como “traidora” por las comunidades y militantes que apoyan a Castillo. Los sectores de derecha que promovían su caída ahora la respaldan. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) informó que visitará Perú entre hoy y el viernes.

Evo pide a ONU y Cidh detener la “masacre”

El expresidente boliviano Evo Morales hizo ayer un llamado a la ONU, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) y a organizaciones defensoras de los derechos humanos del mundo a que hagan algo para detener la “masacre” de los manifestantes en Perú en el marco de las protestas contra el Gobierno de Dina Boluarte.

“En nombre del sagrado derecho a la vida, de los derechos de los pueblos indígenas reconocidos por la ONU y organismos internacionales, en nombre de la paz y la justicia social, exigimos que paren la masacre de nuestros hermanos en Perú. La violencia destruye la convivencia”, tuiteó el líder del MAS (Movimiento al Socialismo), en referencia a la represión policial en el sur de Perú, fronterizo con Bolivia, que dejó 17 muertos. “Hacemos un llamado a la ONU, Cidh, organizaciones defensoras de Derechos Humanos y movimientos sociales e indígenas del mundo a que unan sus voces para pedir el respeto a la vida de nuestros hermanos peruanos, víctimas indefensas de la represión y la exclusión política”, agregó el exmandatario (2006-2019).

El lunes, la Superintendencia Nacional de Migraciones del Perú le prohibió el ingreso a territorio nacional a Morales por presuntamente realizar actividades políticas que amenazan el orden interno. El expresidente respondió que “los conflictos en Perú no se resolverán con expulsiones, prohibiciones ni represiones”, porque “un pueblo digno como el hermano pueblo peruano sabe que la única solución a la crisis es la refundación del Estado para la recuperación de los recursos naturales con tolerancia e inclusión”, consignó la agencia Sputnik.

Desde que el presidente de Perú, Pedro Castillo, un maestro rural de izquierda, fue destituido y detenido el 7 de diciembre por su intento de suprimir el Congreso y gobernar por decreto, Morales utilizó su cuenta de Twitter para referirse a la convulsión social que atravesó el país con esa crisis política, acusando a la “derecha fujimorista” y “medios derechistas” de haber conspirado para destituir al mandatario.