El abogado Diego Chacón llegó ayer a la mañana a nuestra provincia fuertemente custodiado por los efectivos de la División Investigación Federal de Fugitivos y Extradiciones, se presentó ante el fiscal, designó abogado defensor y se abstuvo de prestar declaración.
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El abogado Diego Chacón llegó ayer a la mañana a nuestra provincia fuertemente custodiado por los efectivos de la División Investigación Federal de Fugitivos y Extradiciones, se presentó ante el fiscal, designó abogado defensor y se abstuvo de prestar declaración.
Chacón había sido detenido el pasado 8 de diciembre en Qatar, luego de que la Justicia jujeña haya solicitado el pedido de captura internacional, tras imputarlo por la supuesta autoría intelectual del robo a una distribuidora del barrio San Pedrito, que terminó con un empleado asesinado a balazos.
El letrado arribó a nuestra provincia alrededor de las 7.30 en el vuelo AR1474 de la empresa Aerolíneas Argentinas. De inmediato fue trasladado a la sede de la Fiscalía del Ministerio Público de la Acusación de la capital jujeña, donde conoció causa de imputación y designó como abogado defensor a Juan Ángel Cabezas, además él mismo asumió como codefensor y nombrará en las próximas horas a otros dos letrados.
Sobre Chacón pesa la imputación de "robo calificado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa en concurso real con el delito de homicidio criminis causa y homicidio criminis causa en grado de tentativa", junto a otras tres personas, que serían integrantes de la peligrosa banda delictiva que el pasado 23 de noviembre ingresó a robar a una distribuidora del barrio San Pedrito de la capital jujeña.
Según la investigación penal que involucra al abogado, él habría aportado datos precisos sobre la logística del predio y el movimiento para que se concrete el robo, hecho que se vio truncado, cuando los empleados se enfrentaron con los delincuentes y uno de ellos disparó a quemarropa, asesinando a un empleado e hiriendo en la pierna a otro.
Ayer alrededor del mediodía, el abogado imputado fue examinado por el médico legista del Ministerio Público de la Acusación y alojado en una celda de máxima seguridad de la Unidad Penal Nº 1 del barrio Gorriti.
Esta medida se dispuso por protocolo sanitario y tras 15 días de aislamiento, será trasladado a la Unidad Penal del barrio Alto Comedero, donde quedará alojado.
Las mismas fuentes consultadas por nuestro diario, permitieron saber que una de las imputadas por el violento hecho solicitó al fiscal que entiende la causa, ampliar su declaración, por amenazas que habría por parte del entorno del abogado.