La nueva generación del periodismo jujeño tal vez haya sentido hablar de él al pasar. Que era un calentón y que terminó peleado con la mayoría de los colegas, inclusive quien escribe esta nota.
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La nueva generación del periodismo jujeño tal vez haya sentido hablar de él al pasar. Que era un calentón y que terminó peleado con la mayoría de los colegas, inclusive quien escribe esta nota.
Pero es una parte de la historia de Daniel Colqui, quien ayer dejó de asistir tras pelear varios años con una enfermedad que lo aquejaba.
El "Negro" fue un apasionado. Vivió el periodismo deportivo como pocos, a pura pasión y dedicación. Trabajó en televisión, radio, escribió para la desaparecida revista "Competencia" y también hizo relaciones institucionales en Gimnasia hace un par de años.
Precisamente, no ocultaba su amor por el club "lobo", al punto que en los 80 llegó a viajar con la barra en colectivo para transmitir un partido. Toda una muestra. Colqui además escribía poesías, en gran parte futboleras, y tiempo atrás, antes que el destino nos separara vaya a saber por qué, teníamos decidido que iba a transcribirlas en un libro, siendo mi persona la encargada de la corrección y el prólogo respectivo. No se hará y también duele porque hubiese sido un gran homenaje para él.
A los "changos de la banda", como nos solíamos llamar cuando cubríamos todos a Gimnasia en los 90 y 2000, nos impactó la noticia. Desde temprano los mensajes se hicieron sentir en los celulares. También a su familia obviamente los entristeció y a alguien quien lo quiso como a un hijo, que llenó de consejos, le dio trabajo inclusive en tiempos difíciles y siempre estuvo dispuesto a escucharlo.
Se trata de Juan Carlos Lugano, el exarquero "albiceleste" y actual productor de seguros, quien le dijo a El Tribuno de Jujuy sobre esta pérdida que "Daniel entregó su vida a una pasión, más allá de cualquier actitud y que nosotros no somos quiénes para juzgarlo. Vivió a su manera y dejó un legado: Todo se puede", sostuvo.
"No fue a ninguna Escuela de Periodismo, ni facultad ni nada por el estilo. Él se fue haciendo sobre la marcha, leyendo mucho, escuchando y a veces es 20 veces más difícil que alguien te oriente. Se hizo solo y logró mucho", añadió. Por último, "Carucha" afirmó que la ida del colega nos deja un mensaje: "La vida es un ratito, como prender o apagar un fósforo. Siempre lo recordaré con mucho afecto".