El Carnaval de Flores, una de las festividades más convocantes y populares, tuvo ayer su desentierro en distintos puntos de la provincia. Uno de ellos fue en barrio El Chingo de la capital jujeña, donde se realiza desde el año 1959. Fue con gran concurrencia y la tradicional "bajada de los disfrazados".
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El Carnaval de Flores, una de las festividades más convocantes y populares, tuvo ayer su desentierro en distintos puntos de la provincia. Uno de ellos fue en barrio El Chingo de la capital jujeña, donde se realiza desde el año 1959. Fue con gran concurrencia y la tradicional "bajada de los disfrazados".
La agenda inició el pasado 2 de marzo con la tradicional "chaya de banderas", continuando ayer con el desentierro del Carnaval de Flores y finaliza hoy con el entierro del "Pujllay".
Las comparsas encargadas del desentierro fueron "Los Alegres del Chingo", que además cuenta con la "bajada de los disfrazados", y "Retote la Calera".
Diego Mamaní, integrante de la comparsa "Los alegres del Chingo", comentó a El Tribuno de Jujuy que "desde las 13 nos reunimos con la orquesta y la comisión, somos alrededor de 150 integrantes. Este festejo lo venimos realizando desde 1959, siendo mi abuela una de las precursoras junto a otras vecinas que siguen formando parte de la comparsa", remarcó.
La alegría y diversión por parte de grandes y chicos se evidenció a la hora de jugar con espuma y nieve. Los disfraces por parte de vecinos de todas las edades, fueron una constante. Las temáticas variaban y quedaban a la creatividad de cada uno, siendo la más llamativa el disfraz de jugadores de la "Scaloneta" junto a la copa del mundo. Además, acompañaron los populares "diablos", personajes de la serie "Casa de Papel" y demás propuestas.
Al respecto, Diego explicó que "la temática de disfrazarse data de hace mucho tiempo, la innovación estuvo en realizar la 'bajada de los disfrazados', desde el año 2016, para poder visualizar bien a cada uno de ellos. Antes salían disfrazados desde sus casas y se reunían en la chaya de las banderas y en el desentierro. Podemos decir que la bajada gustó mucho y es llamativa para quienes no suelen frecuentar esta fiesta".
En lo que respecta a la cantidad de asistentes, mencionó que "sacamos una estadística y cerca de cinco mil personas son las que participan y disfrutan junto a nuestra comparsa, pero también habría que contabilizar a quienes acompañan a la comparsa 'Retote', con la que se mantiene un lazo de amistad. El barrio se ve muy poblado durante estos días".
Desde el lado comercial, muchos vecinos se vieron beneficiados, principalmente aquellos que cuentan con kioscos. La venta de nieve, talco, sándwiches y bebidas fueron una constante en las calles. (Mauro Rodríguez).