Una familia del barrio Villa Martínez, de Córdoba capital, vivió una doble desgracia, ya que se les incendió la casa y al mismo tiempo delincuentes le robaron a los vecinos que intentaban ayudarlos.
Mientras la situación era alarmante, debido a que las llamas provocaron consecuencias negativas en los integrantes del domicilio, un grupo de ladrones le quitaron las pertenencias a aquellas personas que brindaban ayuda a los damnificados. .
Según informaron fuentes policiales, una de las víctimas del incendio que ocurrió el sábado pasado fue una joven que tuvo que ser internada en el Instituto del Quemado y permanece con pronóstico reservado.
El lamentable hecho sucedió durante la madrugada a raíz de un cortocircuito en un artefacto que estaba en una de las habitaciones. Las llamas no demoraron en expandirse rápidamente en la vivienda, en la que se encontraban adultos y menores.
Los integrantes del inmueble intentaron escapar por el fuego, pero se toparon con un portón que estaba cerrado con candado por seguridad. Entonces, algunos vecinos de la zona se acercaron para ayudarlos.
Mientras un hombre tomó su celular para contactarse con los bomberos, un delincuente le quitó el dispositivo e impidió que se pudiera comunicar.
Según relataron los testigos, una familia se dirigió hacia el domicilio incendiado para llevarle donaciones y se enfrentó ante un intento de asalto.
De todos modos, los bomberos asistieron al lugar de los hechos, contuvieron el fuego, pero el daño ya era irreparable
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Una familia del barrio Villa Martínez, de Córdoba capital, vivió una doble desgracia, ya que se les incendió la casa y al mismo tiempo delincuentes le robaron a los vecinos que intentaban ayudarlos.
Mientras la situación era alarmante, debido a que las llamas provocaron consecuencias negativas en los integrantes del domicilio, un grupo de ladrones le quitaron las pertenencias a aquellas personas que brindaban ayuda a los damnificados. .
Según informaron fuentes policiales, una de las víctimas del incendio que ocurrió el sábado pasado fue una joven que tuvo que ser internada en el Instituto del Quemado y permanece con pronóstico reservado.
El lamentable hecho sucedió durante la madrugada a raíz de un cortocircuito en un artefacto que estaba en una de las habitaciones. Las llamas no demoraron en expandirse rápidamente en la vivienda, en la que se encontraban adultos y menores.
Los integrantes del inmueble intentaron escapar por el fuego, pero se toparon con un portón que estaba cerrado con candado por seguridad. Entonces, algunos vecinos de la zona se acercaron para ayudarlos.
Mientras un hombre tomó su celular para contactarse con los bomberos, un delincuente le quitó el dispositivo e impidió que se pudiera comunicar.
Según relataron los testigos, una familia se dirigió hacia el domicilio incendiado para llevarle donaciones y se enfrentó ante un intento de asalto.
De todos modos, los bomberos asistieron al lugar de los hechos, contuvieron el fuego, pero el daño ya era irreparable