A través de la línea y la forma, la fibra de lo jujeño se potencia en el arte con los colores que se combinan desde el amor en piezas que llaman la atención.
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A través de la línea y la forma, la fibra de lo jujeño se potencia en el arte con los colores que se combinan desde el amor en piezas que llaman la atención.
Cada vez que la inspiración llega para finalizar en los trabajos, hay fiesta de la paleta de las tonalidades que se sirve de la inventiva y de una mirada singular, entendiendo la sensibilidad de resaltar lo típico de la Quebrada y la Puna.
Paula Pérez y Virginia Oviedo son las creativas de "Sonqo Llama", un emprendimiento que desde lo artesanal busca la originalidad para regalarla en piezas y accesorios bonitos.
El inicio de este proyecto se marcó en el año 2007, cuando en la capital jujeña la unión femenina selló una hermandad infinita con la Pachamama. Es que, siendo estudiantes de artes en el Profesorado de Artes Visuales, se vinculaban desde la amistad y el diálogo constante. Muchos fueron los momentos que compartieron día tras día, al punto de soñar con ser parte de los mismos planes, además de viajes y salidas. Así, pasaron los años y como docentes se recibieron. Ellas se desempeñaron en Educación pero jamás se olvidaron de aquel anhelo que las unió con fuerza, el de entablar una conexión para que juntas tracen la vía de la producción de objetos artísticos decorativos.
La propuesta siempre fue poder transmitir el amor a nuestra cultura jujeña y a su religión basada en la Madre Tierra que es la diosa creadora y contenedora de vida. De esa mística especial, nació "Sonqo Llama" que significa corazón de llama en la voz quechua.
El animal emblema de este vuelo artístico es la llama. Especie de camélido que obedece a las leyes de nuestra naturaleza silvestre y que tanto irradia idiosincrasia de la cultura andina. Y la firma lo enaltece desde su producción armoniosa con líneas, colores, texturas y formas por lo que exhibe piezas exponentes de virtud imaginativa. "Con una amistad de años cada vez que nos tocaba realizar trabajos prácticos, siempre estábamos pensando cómo resolver la tarea de la manera más creativa, divertida y colorida. Ya con los años y recibidas, empezamos a pensarlo desde lo decorativo", expuso Paula Pérez, una de las especialistas. Entonces, primero invirtieron en macetas de cerámica y tela para armar almohadones con rellenos, cierres y acrílicos.
"Teníamos en mente trabajar la sublimación casera con diseños propios de guardas, pero para sábanas que nos quedó en el tintero ya que la inversión superaba nuestro capital. Siempre estuvimos creando y probando nuevos soportes", destacó Pérez sobre la iniciativa en la que también utilizaron su habilidad para realizar pinturas por encargo.
La idea que moviliza a "Sonqo Llama" es que el resultado final fuera original e inspirado en paisajes donde el alma jujeña se complemente con los matices fieles a las regiones con un toque artístico para el público atento. "A los diseños los fuimos creando a partir de lo que conocemos y amamos lo que son nuestras regiones como los paisajes y las creencias. Las dos venimos de familias de la Puna y Quebrada; y cada tanto regresamos a donde nuestras familias viven o vivieron. Ejemplo para la Señalada se preparan las flores para marcar a las ovejas y cabras", explicó. De manera que en ningún momento dejaron de revalorizar los rituales que enriquecen a Jujuy.
Y -por ello- la presencia fuerte de la energía del color ya que no dejan de vivirlos, ni de enriquecerse con ellos. "Los colores son lo principal, lo intenso que transmiten. La sensación de crear algo tan propio es de satisfacción y orgullo. Y el doble, cuando ves cómo le gusta a otros", expresó Pérez. "Hemos utilizado flores de lanas para realizar las vinchas", contó la artista que también realiza anotadores en madera, macetas de llamas y otras colgantes de cerámica decorada, espejos de diseño, lapiceras con lana, porta inciensos, vasijas y un sinfín de obras que son creadas a viva inventiva para sorprender.