Luego de ser condenado por ejercer violencia de género contra su expareja, Sebastián Villa fue separado del primer equipo de Boca. Ante esto, él decidió volver a Colombia e intimar al club de la ribera, y hubo respuesta por parte de la Institución.
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Luego de ser condenado por ejercer violencia de género contra su expareja, Sebastián Villa fue separado del primer equipo de Boca. Ante esto, él decidió volver a Colombia e intimar al club de la ribera, y hubo respuesta por parte de la Institución.
En la carta documento que envió el delantero colombiano pedía ser reincorporado a los entrenamientos, de lo contrario se consideraría jugador libre.
Frente a este requerimiento, Boca se tomó unos días para responder y lo hizo de manera contundente, rechazó el pedido de Villa, le exigió que vuelva a la Argentina y que podía usar el club para entrenarse.
De esta manera, Boca busca cuidar su patrimonio y no perder el pase del futbolista, que pretende quedar libre para poder negociar con otros clubes fuera de Argentina, a pesar que la otra causa que tiene en su contra por la denuncia realizada por Daniel Cortes por “abuso sexual con acceso carnal e intento de homicidio”, un delito que prevé una pena de 15 años de prisión, por lo que el colombiano podría terminar en la cárcel si es encontrado culpable.
Más allá de toda la problemática que rodea al tema, Boca sigue siendo dueño del pase de Sebastián Villa y desde el Xeneize buscan una transferencia para poder quedarse con un dinero: sin embargo, la idea del colombiano es es irse gratis y quedar con la ficha en su poder.
Villa, que cuenta con el asesoramiento de un abogado laboral, quiere ganarle a Boca por cansancio y quedar libre.
De hecho, comenzó intimando al Xeneize para que lo reincorporen a los entrenamientos y piensa repetir este mecanismo una y otra vez sabiendo que no prosperará, aunque así espera lograr el objetivo paralelo.