Un hombre que asesinó a una mujer en el 2012 en la ciudad de San Pedro de Jujuy y que se encuentra cumpliendo una pena de cadena perpetua en Córdoba por el homicidio de una turista chilena en el 2016, fue condenado en nuestra provincia a la pena de 10 años que se acumulan a la otra sentencia.
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Un hombre que asesinó a una mujer en el 2012 en la ciudad de San Pedro de Jujuy y que se encuentra cumpliendo una pena de cadena perpetua en Córdoba por el homicidio de una turista chilena en el 2016, fue condenado en nuestra provincia a la pena de 10 años que se acumulan a la otra sentencia.
El veredicto fue dictado ayer por el Tribunal en lo Criminal Nº 2, quien encontró a Justo Ismael Pereyra, autor material y responsable del delito de "homicidio simple", luego de asesinar a Rosalín del Valle Campos en la ciudad de San Pedro de Jujuy.
De acuerdo al requerimiento del MPA, Justo Pereyra fue enjuiciado por lo sucedido el 18 de junio de 2012, en un domicilio ubicado en el barrio La Merced de San Pedro de Jujuy. Durante la jornada, en horas de la tarde, el acusado procedió a agredir en su integridad física a Rosalín Del Valle Campos, provocándole lesiones que le provocaron la muerte el 19 de junio de 2012.
El condenado, Justo Pereyra, se encuentra actualmente cumpliendo una pena de prisión perpetua en un establecimiento penitenciario de la provincia de Córdoba, por violar y asesinar a una turista chilena.
En relación a aquel caso, el hecho ocurrió el 22 de enero del 2016 en un camping ubicado a la vera del río Quilpo en la localidad cordobesa de San Marcos Sierras.
De acuerdo con la investigación, se pudo establecer que cuando regresaban de un fogón que habían compartido sobre la margen del río, aprovechado la oportunidad y en forma sorpresiva Pereyra habría atacado a la mujer desde atrás, asestándole varios golpes en la cabeza con una piedra, para luego quitarle la ropa que llevaba puesta, someterla sexualmente, y finalmente la estranguló con sus manos hasta provocarle la muerte.
Luego Pereyra habría ocultado el cuerpo de Salas tras un matorral cerca del río.
El fiscal ante el Tribunal fue Agustín Héctor Jarma, quien en su alegato solicitó 10 años de prisión para el acusado, pena acumulada a la prisión perpetua que se encuentra cumpliendo en la ciudad de Cruz del Eje en la provincia de Córdoba.
Por su parte, la defensora técnica del enjuiciado, Defensora Oficial Penal, Natalia Soledad López, del Ministerio Público de la Defensa Penal, consideró adecuada la pena solicitada por la Fiscalía, aunque agregó como circunstancia atenuante la falta de apoyo a la salud metal del acusado y su arrepentimiento.
Además, solicitó su traslado a Jujuy para el cumplimiento de las penas por acercamiento familiar.