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A pesar de los años, John Fitgerald Kennedy (JFK), aquel carismático y joven presidente de los Estados Unidos quien murió víctima de un magnicidio en 1963, sigue produciendo noticias y sumando escándalos a su haber.
JFK era, según las malas lenguas, un adicto al sexo y muchas fueron las mujeres que pasaron por su alcoba, famosas y no tanto; divas y desconocidas, pero parece que la lista no tiene fin y las memorias y biografías siguen apareciendo cada tanto. Esta vez le tocó el turno a Mimi Alford, ahora devenida en una respetable abuela de 69 años, quien confesó que no solo fue amante de “The President” sino que además éste le “robó” la virginidad, cuando era becaria en la Casa Blanca, allá por 1962, a los 19 años.
Mimi Alford, saltó a la opinión pública cuando la semana pasada el diario New York Post adelantó algunos párrafos del libro “Once Upon a Secret: My Affair with President John F. Kennedy and Its Aftermath”, en español: “Érase una vez mi secreto. Mi ‘affair’ con John F. Kennedy y sus secuelas”, en los que relata varias intimidades que no por lejanas en el tiempo dejan de ser explosivas.
Los secretos de Mimi
Según la versión de Alford, conoció al presidente norteamericano en 1962, a los 19 años a sólo cuatro días de ingresar como becaria a la Casa Blanca. En esos días recibió una invitación para concurrir a la piscina en donde JFK nadaba a diario con fines terapéuticos. Esa misma noche concurrió a una fiesta junto a otras dos becarias, pero ella fue la elegida por el presidente para realizar un tour por el palacio. En ese paseo fue que llegaron hasta el dormitorio del mandatario: “El se me acercó por detrás y sentí su aliento caliente en mi cuello, luego me susurró al oído y desabotonó la espalda de mi blusa, metió sus manos que acariciaron mis pechos... y me preguntó ¿Lo has hecho antes?, -No, respondí yo. “El hecho de que me deseara el hombre más famoso y poderoso de América solo aumentó mi sensación de que cualquier resistencia no era una opción. Por eso no le dije que no”. A partir de allí comenzó un apasionado romance, siempre según sus dichos, pero es dable recordar que ese mismo año también frecuentaba sus sábanas la infortunada diva Marilyn Monroe, entre tantas otras, quien era, desde hace más de ocho años, su amante oficial, por decirlo de alguna manera.
Kennedy y Dave Powers
Detalles escabrosos
En su libro, Alford, a la vez que cuenta detalles de la relación íntima de la pareja, tales como: “Nunca nos besamos en la boca cuando hacíamos el amor y yo me dirigía a él como ‘Mr. President’, jamás lo llamé por su nombre de pila”, también afirma que Kennedy la obligó a practicarle sexo oral a uno de sus asesores, Dave Powers, porque este se encontraba “tenso” a lo que ella accedió. Esa no sería la última vez que se lo pediría, aunque ella sostiene que posteriormente se negó.
Además relató que durante la “crisis de los misiles” en 1962 , en plena Guerra Fría entre EEUU y la URSS, llegó a decirle: ‘Prefiero a mis hijos comunistas que muertos‘”.