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Docentes desprestigiados

Domingo, 18 de marzo de 2012 22:18
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Hasta hace algunos años, (no muchos) tenía un completo desinterés acerca de la política y los políticos. De niña escuchaba a mi madre decir: “Los políticos son todos iguales” y me interrogaba si de verdad la situación era así. Tristemente, con los años comprobé la realidad. Hace un tiempo sentí que desde el Gobierno había una clara intención de inclusión de jóvenes y estaba esperanzada en nuestros gobernantes.

La frase “los docentes trabajan 4 horas y tienen 3 meses de vacaciones” ya la había oído antes, pero señora presidenta, hubiera dicho que no había fondos para los docentes, que aguanten un año más, o que todavía no estaban dadas las condiciones para subir los salarios, pero esta frase desafortunada no la esperaba de usted.
Vengo de una familia en la que la docencia fue y es la actividad laboral por excelencia y de la cual nos enorgullecemos.

Desde niña, todas las tardes después de la escuela y los sábados y domingos, en medio de los mates y la comida familiar, se mezclaba la elaboración de planificaciones, proyectos, planillas, registros de asistencia, libretas y hasta la confección de material didáctico. Horas y fines de semana completos.
Me doy cuenta de que usted no sabe acerca de la docencia. Todos los maestros que tienen la posibilidad buscan desesperadamente trabajar doble turno para poder llegar a fin de mes. Las condiciones laborales son espantosas.

Quiero decirle que luchamos a diario con niños que no nos respetan. Ya no somos “la segunda mamá” como en mi época de primaria, ahora nos ven como enemigos. Esto se desprende directamente de la proyección que da la familia a la educación. Ahora se agrega su proyección, señora presidenta. Hubiera sido más provechoso que ni nos mencionara en su discurso.

Alejandra D’Annunzio
Ciudad

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