El expresidente Carlos Menem y el exjuez federal Juan José Galeano se negaron hoy a prestar declaración indagatoria en el juicio que se sigue en su contra por presuntas irregularidades en la investigación del atentado a la AMIA.
A la vez, el Tribunal Oral Federal 2 (TOF2) rechazó todos los planteos previos hechos por las defensas de los acusados sobre supuestas irregularidades en la investigación del ataque a la mutual judía.
A través de una video conferencia y acompañado por su abogado, el exmandatario y actual senador nacional se negó a declarar, por lo que se dio lectura a un escrito que presentó oportunamente durante la instrucción de la causa.
"Tenía un buen concepto de Galeano, por lo cual me eximió de sospechar de su actuación", señaló el riojano en su descargo.
Menem sostuvo que Galeano le había solicitado fondos para costear un viaje a Venezuela para entrevistar a un testigo y que, en ese marco, había respaldado las investigaciones que había llevado adelante el magistrado.
Desde su departamento, el actual senador, vestido con un pullover gris a rombos oscuros, aseguró que se iba a negar a declarar en esta instancia, aunque cualquiera de los acusados puede hacerlo durante el transcurso del juicio.
Al iniciar la audiencia, el tribunal dio lectura a un oficio librado a la Secretaría Legal y Técnica de la Presidencia de la Nación, requiriéndole información respecto de la existencia de "restricciones" para que Menem revele información relacionada con la causa.
A ese pedido, el organismo oficial respondió que "no hay ningún impedimento" para que haga público lo que consideró "secretos de Estado".
Durante el transcurso de la última audiencia dos jueves atrás, la defensa de Menem solicitó que el Senado relevara del secreto de Estado al exmandatario en torno al atentado a la AMIA, pero advirtió que sus dichos "podrían afectar los intereses" de la Nación y "el rompimiento de la convivencia pacífica" con otros países.
El pedido había sido hecho por el abogado defensor de Menem, Omar Daer, y sus dichos causaron revuelo político respecto de las presuntas revelaciones que podría efectuar en torno a la llamada pista siria, y que podría haber desviado información en ese sentido.
"Se trata de razones de Estado que pueden afectar al Gobierno actual y a los intereses de la Nación y la ciudadanía, en cuanto a los que Menem pudiera declarar si logramos que se lo releve del secreto de Estado", subrayó Daer.
Galeano rechazó la pista siria
En tanto, Galeano también se negó a declarar, por lo que, como es de rigor, se dio lectura a las indagatorias anteriores, también de la instrucción.
En ellas, defendió su actuación respecto del pago de 400 mil dólares al reducidor de autos robados Carlos Alberto Telleldín, en una operación que el exmagistrado consideró "compra de información" con fondos reservados de la ex-SIDE, cuando ocupaba su titularidad otro de los imputados Hugo Ansorreguy.
En aquella ocasión, Galeano sostuvo que se trató de una operación "secreta", la que no tuvo objeciones por parte de la Comisión Bicameral de Seguimiento de los Atentados contra la AMIA y la Embajada de Israel, ni por parte de la Corte Suprema de Justicia, ni de la por entonces diputada y actual presidenta, Cristina Kirchner, jefa de esa comisión.
En ese sentido, señaló que cuando se produjo la declaración de Telledín "nadie consideró ilegal" su "conducta y tampoco la consideró ilícita".
"Nunca se negoció nada", señaló Galeano en su descargo, al negar que ese dinero se le había entregado a Telleldín para desviar información y que se acusara por el atentado a miembros de la Policía Bonaerense, imputados en la causa Brigadas.
Al respecto, recordó que los decretos 2223/94, 2224/94 y 2225/94 dieron marco a esa operatoria, a través de las "normas secretas vigentes" al momento respecto de los fondos que el Estado destinaba a la ex-SIDE para obtener información referida a la seguridad.
Galeano sostuvo que tales operaciones se llevaron a cabo en el marco de "un estricto secreto y confidencialidad" y hasta se llegó a la "compra de información", a la vez que lamentó que tal accionar se hubiera hecho público tras las acusaciones en su contra.
En relación a la llamada pista siria, afirmó que se trata de "una fábula de origen espúreo utilizada políticamente", pero afirmó al respecto que realizó una investigación que llegó acubrir 77 cuerpos del expediente.
Sin embargo, fustigó al fallecido fiscal Alberto Nisman, al señalar que "en 12 años que tuvo la causa nunca dijo nada" respecto de la vinculación del sirio Jacinto Kanoore Edul, en cuanto a que el hermano del expresidente Menem, Munir Menem, le había pedido que no lo investigara.