La droga iba oculta entre dos asientos de un ómnibus de larga distancia de la empresa Flecha Bus, que viajaba desde Salvador Mazza, en la frontera con Bolivia, rumbo a la capital salteña.
El animal, llamado Pituca, de raza Labrador realizó el hallazgo durante la requisa de vehículos de transporte de pasajeros, en el puesto fijo de control de Gendarmería, situado sobre la ruta nacional 34, a la altura de Aguaray.
El estupefaciente iba oculto entre los asientos 47 y 48, en un paquete amorfo. Cuando el can olfateó, inmediatamente marcó el lugar.
Nadie se responsabilizó del cargamento, consistente en 7 cápsulas de 10 gramos cada una, que fueron secuestradas y puestas a disposición del Juzgado Federal 3, con asiento en Orán.
 

La droga iba oculta entre dos asientos de un ómnibus de larga distancia de la empresa Flecha Bus, que viajaba desde Salvador Mazza, en la frontera con Bolivia, rumbo a la capital salteña.
El animal, llamado Pituca, de raza Labrador realizó el hallazgo durante la requisa de vehículos de transporte de pasajeros, en el puesto fijo de control de Gendarmería, situado sobre la ruta nacional 34, a la altura de Aguaray.
El estupefaciente iba oculto entre los asientos 47 y 48, en un paquete amorfo. Cuando el can olfateó, inmediatamente marcó el lugar.
Nadie se responsabilizó del cargamento, consistente en 7 cápsulas de 10 gramos cada una, que fueron secuestradas y puestas a disposición del Juzgado Federal 3, con asiento en Orán.