Un cargamento de cristales graduados para anteojos y una máquina biseladora, valuados en $155.000, fue secuestrado por personal de Gendarmería Nacional, durante un operativo de rutina, realizado por los efectivos del puesto de control fijo situado sobre el puente del río Caraparí.
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Un cargamento de cristales graduados para anteojos y una máquina biseladora, valuados en $155.000, fue secuestrado por personal de Gendarmería Nacional, durante un operativo de rutina, realizado por los efectivos del puesto de control fijo situado sobre el puente del río Caraparí.
El paquete iba en la bodega de un colectivo de larga distancia de la empresa La Veloz del Norte y fue descubierto cuando realizaban un “semblanteo” en la unidad, es decir, mientras controlaban el vehículo para evitar el tráfico de sustancias prohibidas.
Si bien el secuestro tuvo lugar el 14 de septiembre pasado, recién salió a la luz el jueves último, luego de que los uniformados analizaran las probables derivaciones del procedimiento y agotaran todas las posibilidades.
El caso quedó en manos del juez Federal de Orán, Raúl Reynoso, quien ordenó el secuestro y que los investigadores profundicen sus tareas.
Secuestro
El operativo se inició cerca de las 12.40 de ese miércoles, cuando la unidad llegó al puesto de control, proveniente de Salvador Mazza. Los uniformados la abordaron para controlar la documentación.
En ese momento advirtieron que había una caja extraña en la bodega del rodado, separada del resto del equipaje, como si hubiera sido colocada con posterioridad al abordaje.
Cuando los gendarmes la recogieron, les llamó la atención su peso excesivo y, ante la posibilidad de que contuviera drogas, la secuestraron.
Finalmente, el jueves pasado la abrieron con la autorización de Reynoso. En el interior hallaron 580 cristales graduados y una máquina biseladora, cuyo valor comercial asciende a $155.000.