El hecho se inició a la madrugada en la colectora de Autopista Panamericana, cuando tres jóvenes amigos de 22 años, que salían de una fiesta fueron interceptados por un delincuente de 17 años el cual -según consta en la causa- los obligó a apagar las luces del vehículo y a punta de pistola los hizo circular con dirección al barrio "La Cava" de San Isidro, de donde sería este sujeto.
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El hecho se inició a la madrugada en la colectora de Autopista Panamericana, cuando tres jóvenes amigos de 22 años, que salían de una fiesta fueron interceptados por un delincuente de 17 años el cual -según consta en la causa- los obligó a apagar las luces del vehículo y a punta de pistola los hizo circular con dirección al barrio "La Cava" de San Isidro, de donde sería este sujeto.
Al doblar desde colectora Panamericana hacia adentro de la localidad de Don Torcuato, partido de Tigre y a unas 7 cuadras de iniciado el raid delictivo, un móvil de seguridad municipal que patrullaba el barrio durante la madrugada visualizó al Chevrolet Corsa y decidió realizarle un control preventivo ya que circulaba sin luces.
El vehículo conducido por una de las tres víctimas que venían privadas de su libertad siguió circulando bajo las amenazas del malviviente y al llegar a la ruta 202 cruzó el semáforo en rojo, momento donde el móvil de seguridad de Tigre se le puso a la par y les dio a voz de alto.
Parecía que el Corsa detenía su marcha, pero sólo redujo la velocidad y a los pocos metros, el conductor abrió la puerta en movimiento y se arrojó a la acera para acercarse al móvil y pedir auxilio, mientras el auto siguió unos metros y ya sin conductor se frenó en el cordón.
El delincuente lo tomó del pelo a otro de los jóvenes y lo arrojó del auto a la vereda mientras amenazaba con un revólver Magnum 357 al grito de "andáte que lo mato" mientras los policías les ordenaban a todos que se arrojen al piso y depongan su actitud, sin identificar en primera instancia quién era quién ante tamaña situación.