Fauna en peligro. Las distintas especies silvestres de la provincia son blanco de sistemáticos ataques de cazadores furtivos, traficantes de animales autóctonos y, en menor medida, accidentes por los que terminan sus días en cautiverio.
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Fauna en peligro. Las distintas especies silvestres de la provincia son blanco de sistemáticos ataques de cazadores furtivos, traficantes de animales autóctonos y, en menor medida, accidentes por los que terminan sus días en cautiverio.
En la capital salteña está el área protegida de Finca Las Costas y, dentro de ella, funciona la Estación de Fauna Autóctona (EFA) de la Provincia. En su interior, hay una gran variedad de especies silvestres, pero lejos de intentar funcionar como un zoológico, la EFA es un centro de rescate, rehabilitación, liberación y derivación de los animales que llegan al lugar.
A veces este objetivo no se puede cumplir y los animales se quedan en cautiverio hasta que cumplen con su ciclo de vida.
Para resumirlo, el secretario de Ambiente de la Provincia, Gustavo Paul, lo presenta de la siguiente manera: “Este lugar es una consecuencia del mal accionar humano y acá se trata de subsanar ese comportamiento recuperando a los animales para intentar reinsertarlos en su medio”.
La EFA depende del programa de biodiversidad, de la Secretaria de Ambiente del Ministerio de Ambiente y Producción Sustentable. La responsable del lugar, la licenciada en Ciencias Biológicas Soledad de Bustos, explica que en el lugar “se intenta darle las mejores condiciones a los animales que llegan producto del mascotismo, el tráfico ilegal, la caza furtiva y la tenencia ilegal”, entre otras razones.
Actualmente hay en la EFA más de 200 animales de diferentes especies entre aves, mamíferos y reptiles; algunos de los cuales están incluidos bajo alguna categoría de conservación. “Un ejemplo es el tapir, que no solo está considerada como una especie en peligro de extinción en la Argentina sino que además fue declarada monumento provincial, lo cual significa que está prohibida su caza y hay que trabajar en pos de su conservación”, explica De Bustos a El Tribuno.
Entre los mamíferos se destacan los pumas, que es una especie muy conflictiva no solo con el humano sino también con el ganado, especie a la que atacan con mucha frecuencia en la provincia. “El puma es un gran carnívoro que requiere cantidades importantes de carne para subsistir por lo que ataca desde ovejas hasta potrillos y, en represalia, el hombre lo caza para cuidar su ganado”, cuenta la responsable de la EFA, quien además señala que “también se da que los atrapan cuando son crías y luego el animal crece y no lo pueden tener más en las casas, entonces los traen para acá”.
Además de los pumas hay tapires, monos, zorros, guanacos, armadillos, corzuelas pardas y coloradas, osos hormigueros y osos meleros.
Entre las aves, en tanto, hay un águila negra y un jote cabeza colorada. También hay reptiles, como lagartijas, lagartos colorados, yacarés y tortugas.
Abierta para escuelas
La EFA solo está habilitada al público para hacer recorridas escolares. “Este no es un lugar para que vengan a pasear y a conocer animales solamente. Buscamos crear conciencia de que esta no es la manera en la que tienen que vivir estos animales porque son especies silvestres y no deben estar en cautiverio. Además, cada especie tiene su función en su ecosistema y es bueno que eso los chicos lo aprendan desde pequeños”, destaca De Bustos.
“Lamentablemente no todas tienen la posibilidad de volver a su entorno natural porque pueden generar algún conflicto con el ser humano o porque muchas de ellas sufrieron tales heridas que ya no pueden recuperar su anatomía natural”, dice De Bustos.
“Otra razón que dificulta la reinserción de los animales que pasaron mucho tiempo en cautiverio es que suelen adquirir alguna enfermedad que en la zona donde están no representa un peligro, pero que al volver a su ecosistema y ponerse en contacto con otros animales de su especie los pueden contagiar y generar una gran mortandad”, amplía Paul.
El secretario de Ambiente dijo que por esa razón “hay que hacerles muchos estudios y tomar en cuenta una gran cantidad de factores antes de volver a liberar un animal en su hábitat. Es lo que más deseamos, pero no se puede hacer de la noche a la mañana”.
Una dolorosa historia...
Catalina es una de las protagonistas de una historia que pinta cruda, pero verídicamente, el calvario que suelen sufrir los animales silvestres que caen en manos de personas desaprensivas.
Si bien no hay un registro temporal exacto, lo concreto es que llegó a Salta capital hace siete años aproximadamente. Era la estrella de un circo de los que aún incluyen animales en sus espectáculos. La presentaban como “El elefante enano”. Una gran atracción.
El precio que tuvo que pagar por una fama que no buscaba fue tan salvaje como su origen. Los responsables del circo le amputaron las pezuñas de sus patas para que se asemeje a las de un elefante.
Así llegó a la Estación de Fauna, tras ser arrancada de su hábitat y mutilada por sus captores por un puñado de pesos.
En la reserva se curó de a poco y, si bien nunca se recuperará por completo, el animal logró ponerse en pie nuevamente, aunque con grandes dificultades ya que soporta el peso de sus 180 kilos en sus patas sin pezuñas.
Hace un mes y medio, Catalina dio a luz. Su cría, una hembra a la que los trabajadores de la EFA llaman Milagro, pesó siete kilos e integra, junto con otra que ya tiene más de un año, un proyecto mediante el cual evalúan reinsertarlas paulatinamente y bajo una supervisión intensiva, a su hábitat natural.
Las especies
| Aguila Negra. Llegó a la Estación de Fauna luego de ser atropellada por un auto. Tenía el ala derecha quebrada y las heridas eran tan graves que hubo que amputársela. Por esta razón nunca podrá ser liberada nuevamente. Comparte la jaula con un jote cabeza colorada que llegó con un disparo. | |
| Mono caí. Hay varios y están divididos por edades en dos jaulas. Se caracterizan porque forman tropas y siguen a un líder. Es un animal que se encuentra con más frecuencia en la zona de yungas y la gente los caza para tenerlos como mascotas. | |
| Oso melero. También es característico de las zonas selváticas. En Salta, gracias al imaginario popular, se lo confundió muchas veces con el mitológico personaje del Ucumar. De hecho, hace unos meses llegó a la EFA un oso melero proveniente de El Carril señalado como un Ucumar. Tras unas semanas, fue devuelto a su hábitat. | |
| Corzuela. (El Bambi salteño) Son animalitos muy dóciles y muy perseguidos por los cazadores que buscan su carne. Una vez que ingresan a la estación de fauna es muy difícil reinsertarlas a la vida silvestre ya que rápidamente toman confianza con el hombre. | |
| Yaguarundí. Es el único que hay en estos momentos en la Estación de Fauna y llegó siendo muy pequeño. Es algo agresivo y le huye a los visitantes. Habitualmente se lo encuentra en las zonas de las yungas y del Chaco salteño. Tiene un hermoso pelaje rojizo. |