El chimentero Jorge Rial no parece tener paz. Desde hace seis meses que está enfrentado con su ex mujer, Silvia D’Auro por el juicio de divorcio, pero la pelea se arrastra desde noviembre del 2011, momento en que la crisis de la pareja se desató. Y es el dinero lo que está en juego. El jueves pasado hubo una mediación a través de los abogados de ambos. Ella pidió 8 millones de pesos, en concepto de las presuntas ganancias perdidas y perjuicios por la empresa que crearon con Rial, “Ideas más Ideas”, en el plazo estimado de dos años.
“Durante 22 años traje y ahora te desvalijan. Cuando digo que aporté es porque aporté, y hablo de mi trabajo”, dijo D’Auro a través de su cuenta de Twitter. Y agregó: “No se puede quitar el pan de la boca a quien te sostuvo durante 22 años”.
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El chimentero Jorge Rial no parece tener paz. Desde hace seis meses que está enfrentado con su ex mujer, Silvia D’Auro por el juicio de divorcio, pero la pelea se arrastra desde noviembre del 2011, momento en que la crisis de la pareja se desató. Y es el dinero lo que está en juego. El jueves pasado hubo una mediación a través de los abogados de ambos. Ella pidió 8 millones de pesos, en concepto de las presuntas ganancias perdidas y perjuicios por la empresa que crearon con Rial, “Ideas más Ideas”, en el plazo estimado de dos años.
“Durante 22 años traje y ahora te desvalijan. Cuando digo que aporté es porque aporté, y hablo de mi trabajo”, dijo D’Auro a través de su cuenta de Twitter. Y agregó: “No se puede quitar el pan de la boca a quien te sostuvo durante 22 años”.
Según D’Auro el fundamento es que Rial, después de que se separaron, hizo un vaciamiento de la empresa “Ideas más Ideas” que tiene una ganancia estimada de 500 mil dólares al año y envió a todos los clientes hacia la empresa nueva de él, “La Maña SRL”.
Además, en una entrevista a D’Auro, este dijo que “no tiene sentido que hable porque después van a salir a responderme y él (Rial) tiene seis horas de micrófono. Pero yo me mantengo en mi postura y me quedo en silencio”, sentenció.
Ellos no hablan. Se manejan a través de sus abogados. Y por el momento, los de Rial le negaron el pedido a D’Auro, manteniendo que la empresaria se quedó con fondos gananciales. La cuestión sigue en la Justicia.