Una mujer de 34 años, identificada como Nancy F., fue salvajemente golpeada y violada en Metán y el autor del ataque, luego de consumados los hechos, la amarró a un árbol, desde donde fue rescatada por la Policía luego de casi de diez horas.
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Una mujer de 34 años, identificada como Nancy F., fue salvajemente golpeada y violada en Metán y el autor del ataque, luego de consumados los hechos, la amarró a un árbol, desde donde fue rescatada por la Policía luego de casi de diez horas.
La víctima fue trasladada, luego de haber sido hallada, hasta el hospital Del Carmen de la localidad, donde los facultativos comprobaron que había sido violada anal y vaginalmente, que presentaba mordedudas en cuello , hombros y piernas y que, como si fuera poco, presentaba serias hematomas producto de golpes de puño, puntapiés y elementos contundentes, probablemente piedras.
Lo más increíble del caso es que el autor de los hechos, que fue atrapado ayer a las 17.30 por la Policía, es un menor de 17 años, apodado “El Colo”, con domicilio en el barrio Kennedy.
La víctima contó que se hallaba, en la madrugada de la víspera esperando a unas amigas para ir a bailar, en las inmediaciones del cauce del río Conchas en la zona norte de la ciudad sureña. Dijo que en un momento, apareció desde las sombras el referido “Colo”, quien de un golpe le arrebató su motocicleta y la arrojó al piso, tras lo cual dejó caer el rodado sobre su humanidad, que extrajo un arma de fuego, que la golpeó con una piedra y que también lo hizo con uno de sus puños. La mujer agregó que el adolescente no se detuvo en su brutal agresión ya que la ató de pies y manos, le tapó la boca con sus propias prendas de vestir y que la ultrajó en tres ocasiones.
Nancy señaló que otros dos muchachos estuvieron presentes cuando comenzó su calvario, pero que uno de ellos, ne retiró inmediatamente, quedando por algunos minutos el estante, quien le pedía al “Colo” que no hiciera lo que estaba haciendo, a lo que el causante respondía gritándole “sos un maricón” y otros insultos de diferente calibre.
Nancy F. indicó que durante todo el episodio, su agresor utilizó con dones, que luego guardó en una bolsa.
Cuando la Policía encontró a la mujer maniatada y atada a un árbol, se hallaba desfalleciente y con signos de deshidratación.