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No hay rastros de los tres reos que huyeron de la cárcel

Jueves, 29 de marzo de 2012 19:33

La Policía los busca por todo el departamento San Martín pero se cree que lograron cruzar la frontera hacia Bolivia.Posibilidad. Los investigadores del caso creen que los evadidos enfilaron hacia el norte y salieron del país, de manera inmediata, por un paso clandestino.

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La Policía los busca por todo el departamento San Martín pero se cree que lograron cruzar la frontera hacia Bolivia.Posibilidad. Los investigadores del caso creen que los evadidos enfilaron hacia el norte y salieron del país, de manera inmediata, por un paso clandestino.

Juntos. Las pesquisas indican que los tres prófugos se mueven juntos, que están armados y dispuestos a todo. Son considerados “muy peligrosos”.

La Brigada de Investigaciones y distintas dependencias policiales del norte provincial realizaron al menos seis allanamientos en distintas viviendas de Tartagal y de Salvador Mazza para dar con los tres sujetos que el 21 del corriente se evadieron de la granja de la Unidad Carcelaria 5, situada en el acceso sur de la capital departamental. Aunque la búsqueda continúa, el tiempo transcurrido y la posibilidad de que hayan logrado llegar hasta territorio boliviano convierte en remota la tarea de su recaptura.
Uno de los evadidos es Mario Mansilla, un sujeto considerado de extrema peligrosidad que ingresó al penal hace alrededor de 15 años por dos hechos graves, uno de ellos un asalto a mano armada que terminó con la vida de un conocido comerciante de Tartagal. Dentro del propio penal, asesinó a otros dos reclusos, y fue el cabecilla en un motín producido el año pasado. Los otros dos, identificados como Manuel Barría y Rubén Acosta, purgan condenas por robo calificado por el uso de arma de fuego.
</SUBTITULO>Rarezas

Durante gran parte de su condena, Mansilla cumplió su pena de reclusión perpetua en el penal de Villa Las Rosas pero hace algunos años fue trasladado a Tartagal para tener el beneficio de acercamiento familiar. En el mes de diciembre, la jueza de ejecución Sandra Bonari analizó un pedido realizado por el recluso, quien solicitaba salidas transitorias por haber cumplido más de 18 años en prisión. Bonari denegó el pedido pero accedió a que trabajara en la granja del penal, que posee un régimen de extramuros.
El predio se encuentra al lado de la cárcel y está destinada a los reclusos que se hallan próximos a recuperar su libertad.
El otro juez de ejecución y miembro de la Cámara del Crimen, Ricardo Hugo Martoccia, al ser consultado por El Tribuno explicó que Mansilla trabajaba en la granja porque tanto él como Barría y Acosta habían obtenido la calificación 10, al ser examinados por el Consejo Correctivo del Servicio Penitenciario. “Lo que se dispuso respecto de estos tres evadidos no puede ser considerado un beneficio como son las libertades condicionales o las salidas laborales. El Consejo Correctivo está integrado por psicólogos y psiquiatras y son ellos los que deben determinar si los reclusos pueden o no realizar determinadas actividades. Son ellos quienes deben definir si representan alguna peligrosidad o no; los jueces somos abogados y aplicamos la ley, no evaluamos las condiciones psicológicas de los reos”, manifestó el magistrado.

Sin embargo, fuentes del Servicio Penitenciario aseguraron a este medio que la actividad que los reclusos realizaban -y a la que habían accedido tanto Mansilla como los otros dos prófugos que se escaparon el pasado 21 del corriente- es extramuros, ya que la granja no se encuentra dentro de la unidad carcelaria sino en un predio colindante que carece de la infraestructura y medidas de seguridad que imperan dentro del penal. Los evadidos se encontraban trabajando en una pequeña plantación de maíz; fue la altura de las plantas que facilitó que se escabulleran y se fugaran de la granja. Cuando debían regresar adentro del penal, a las 19, y al realizar el conteo de los reclusos, los agentes advirtieron que faltaban Mansilla, Barría y Acosta; por ese motivo se desconoce cuántas horas tuvieron de ventaja.

Medidas ordenadas

La jueza Azucena Vázquez ordenó una serie de medidas como allanamientos y secuestros de evidencias varias que realizó la Brigada de Investigaciones en casa de familiares y conocidos de Mansilla; los allanamientos se realizaron en especial en barrios del oeste de Tartagal como Belgrano, Santa Rita y 9 de Julio.

El jefe de la Unidad Regional 4 de la Policía de la Provincia, Fernando Camacho, explicó que la búsqueda “se realizó en diferentes barrios periféricos de Tartagal, en especial los que se encuentran ubicados hacia la zona oeste de la ciudad. En la vivienda de un familiar de Mansilla encontramos prendas de vestir mojadas que pueden pertenecer al prófugo, por lo que confiamos en que podamos recapturarlos, ya que estimamos que no están lejos de Tartagal”, manifestó Camacho.

La Justicia podría iniciar una causa contra efectivos del Servicio Penitenciario por supuesta facilitación de fuga, hipótesis que no está descartada.
 

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