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La Gran Rusia 2012 del nuevo presidente Vladimir Putin

Domingo, 04 de marzo de 2012 20:12

El primer ministro reasume la presidencia por los próximos seis años a base de un concreto programa de desarrollo nacional (no a un inteligible “modelo”), que se incorpora al camino transitado hasta el presente de restructuración soberana con claros e indubitables objetivos.

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El primer ministro reasume la presidencia por los próximos seis años a base de un concreto programa de desarrollo nacional (no a un inteligible “modelo”), que se incorpora al camino transitado hasta el presente de restructuración soberana con claros e indubitables objetivos.

Llama la atención por su sencillez, su simpleza y la facilidad de su comprensión. Refiero algunos conceptos sintetizados del plan de Vladimir Putin.

“No voy hablar de éxitos logrados; esos están ahí. Hoy es necesario hablar de los problemas que no se ha logrado resolver y de los objetivos que deben entrar en la agenda del desarrollo de la Gran Rusia.

¿A qué riesgos se tendrá que enfrentar Rusia y qué objetivos deberá alcanzar? ¿Qué puestos debemos ocupar en la política y economía global? ¿Seguiremos el desarrollo de los acontecimientos o seremos nosotros mismos los que definiremos las reglas de juego? ¿Merced a qué recursos podremos fortalecer nuestra posición y, subrayo, generar desarrollo estable?”.

Rusia ha salido de un declive profundo. La economía se desarrolla.

Pero lo más importante es que Rusia durante los últimos diez años ha formado un estrato considerable de gente que en Occidente se llamaría la “clase media”. La clase media es la gente que puede elegir en términos de política. Normalmente tienen un nivel de instrucción que les permite analizar a los candidatos razonablemente y no “votar impulsivamente con el corazón”.

En otras palabras, la clase media ha empezado a formular sus exigencias en diferentes campos. La clase media debe seguir creciendo.

Debe convertirse en la mayoría social de nuestra sociedad y complementarse con quienes “cargan sobre sus hombros” nuestro país: médicos, profesores, ingenieros, obreros cualificados, científicos.

Educación

El objetivo de la Gran Rusia es alcanzar un nivel más alto en materia de educación de nuestra juventud. En la calidad educativa constante de una nueva realidad social: la revolución educativa. Ya no se puede volver atrás.

Las personas más instruidas se traducen en una mayor esperanza de vida para el país, un menor nivel de delincuencia y de comportamiento antisocial y también significa escoger la elección más racional. Todo esto de por sí crea un entorno favorable para nuestro futuro.

Economía

Diversificación de la economía y creación de nuevas fuentes de crecimiento en el convencimiento de que la “economía basada en las materias primas” está agotándose y, lo que es peor, no tiene ninguna perspectiva estratégica. La creación de 25 millones de nuevos puestos de trabajo dedicados a la “alta tecnología” no es simplemente una frase bonita. Es la posibilidad del trabajo “creativo” para el crecimiento profesional y ascenso social. Nadie puede vivir mejor que el que trabaja más.

El desenfreno de los préstamos de vivir con deudas destruyendo el futuro, en valores activos y virtuales -y no reales-, ha entrado en un callejón sin salida. No podemos actuar al azar, ya que luego se deberá quitar al pueblo las consecuencias de las pautas populistas.

Religión y cultura

Las religiones tradicionales juegan un papel inapreciable en la indiferencia al bien común, en la ayuda al prójimo. Enraizado en el idioma, en la literatura rusa, la historia de la patria que forma el tejido multiétnico que une esta civilización única que es el pueblo ruso, la cultura rusa.

La política internacional es una búsqueda hacia la paz mundial.

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