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Robaron $52.000 de una distribuidora de gaseosas

Jueves, 12 de abril de 2012 20:36

Dos sujetos fueron detenidos, acusados por el robo de $52.000 a una distribuidora de gaseosas Secco y comestibles llamada “Dayoub”, en la localidad fronteriza de Salvador Mazza.

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Dos sujetos fueron detenidos, acusados por el robo de $52.000 a una distribuidora de gaseosas Secco y comestibles llamada “Dayoub”, en la localidad fronteriza de Salvador Mazza.

El hecho ocurrió el jueves pasado entre las 13 y 17 cuando los delincuentes abrieron, con una copia de las llaves, el portón principal de un galpón grande, ubicado en cercanías a la calle Paseo Gemes 403, en pleno centro. Luego, caminaron unos metros y doblaron a mano izquierda, donde existe un escritorio. Desde una caja, extrajeron $52.000 y se dieron velozmente a la fuga con el botín.

El propietario de la distribuidora, Sami Dayoub (45) radicó una denuncia el lunes a las 18. Tras tareas de investigación, personal de la Comisaría 40 de Salvador Mazza detuvo el miércoles a dos empleados de la distribuidora, de entre 23 y 25 años, identificados como: Elvio Tolay quien trabajaba desde hacía dos meses en el lugar y José Luis Solís, quien lo hacía desde hace un año.

“Procedimos a secuestrar sus teléfonos celulares y descubrimos mensajes de texto que los comprometían. Al analizar los SMS se logró determinar que los sospechosos habían realizado una copia de las llaves del portón principal. Tenían bien estudiado el lugar y los movimientos. Se lograron recuperar $22.000”, explicaron fuentes policiales.

La causa fue caratulada como “supuesto hurto calificado” y está en manos del Juez de Instrucción Formal 2 de Tartagal, Fernando Mariscal Astigueta.

“Seguimos trabajando en procura de recuperar más dinero ya que todavía hay un faltante de $30.000. Este es un caso complicado ”, señalaron los pesquisas.

En diálogo con El Tribuno, el propietario de la distribuidora, Sami Dayoub manifestó: “ Gracias a la rapidez con la que trabajó la Policía se pudo esclarecer el caso. Sin embargo, me siento muy mal. Siento que violaron mi lugar de trabajo. Tengo hijos y doy trabajo a muchas familias. Sentí unos nervios terribles. La plata va y viene”, dijo el empresario, quien agregó: “Me atormenta pensar en los riesgos que corre mi familia. Estamos en la frontera, esta es una zona caliente y aquí se necesita seguridad”.

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