Juan Barthe, Vanesa Espinoza, René Rodríguez Villagra e Isidoro Zang son fotógrafos. Fascinados por la noche como espacio enigmático donde “todo está por verse” -describe Zang- y donde late “la magia de encontrarnos a nosotros mismos en las sombras acechantes”, decidieron reunir sus obras y armar una muestra que será inaugurada hoy, a las 20.30, en el Museo Casa de Arias Rengel (La Florida 20).
En la exposición “La noche” podrán verse las obras de 4 amigos, con 4 miradas y 4 experiencias de vida diferentes. “Se verán fotos de la basura, una marcha gay, los oficios nocturnos y las fotos que se sacan alrededor de la plaza las quinceañeras y las parejas que se casan”, detalló Zang.
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Juan Barthe, Vanesa Espinoza, René Rodríguez Villagra e Isidoro Zang son fotógrafos. Fascinados por la noche como espacio enigmático donde “todo está por verse” -describe Zang- y donde late “la magia de encontrarnos a nosotros mismos en las sombras acechantes”, decidieron reunir sus obras y armar una muestra que será inaugurada hoy, a las 20.30, en el Museo Casa de Arias Rengel (La Florida 20).
En la exposición “La noche” podrán verse las obras de 4 amigos, con 4 miradas y 4 experiencias de vida diferentes. “Se verán fotos de la basura, una marcha gay, los oficios nocturnos y las fotos que se sacan alrededor de la plaza las quinceañeras y las parejas que se casan”, detalló Zang.
Rodríguez Villagra explicó que “durante la noche las personas desarrollan actividades prohibidas, privadas, casi íntimas o casi mágicas. En mi caso, que trabajé sobre una mirada queer de Salta, es la única hora en la que se podía llevar a cabo, pues es el único momento en que pueden aparecer los personajes de mis fotos. Más allá de que en cierta forma se ha naturalizado ‘la presencia’ trans en nuestra ciudad, la noche es el momento cuando ellas pueden ponerse sus mejores galas y sentirse verdaderas reinas y divas”.
Isidoro Zang agregó por su parte: “La noche tiene algo mágico que quizás el día no, porque es más pasiva, nos movemos en ella de otra forma y el goce y el dolor son distintos durante esa hora del día. Lo que de día compartimos de noche solo es nuestro, aunque estemos acompañados”.