Un 22 de diciembre de 1987 se creaba el Sindicato de Arbitros Deportivos de la República Argentina (Sadra) con el doctor Guillermo Marconi como si titular. El exárbitro y periodista llegó el miércoles pasado a Salta para festejar los 25 años de vida sindical con la seccional de esta provincia, una de las mejores constituidas de las 21 que hay a lo largo de todo el país.
“La seccional y la gente de Salta me hacen sentir siempre muy bien. Entre mis ocupaciones como árbitro, abogado y la política he recorrido el país entero; pero Salta es un lugar especial no solo por la gente que trabaja sino por la seccional que hay, trabajan muy bien y tienen un mérito importante que me hace sentir mejor”, sostuvo Marconi.
En su paso por la provincia dialogó con El Tribuno sobre la conquista de los árbitros del interior por sobre la capital y las posibilidades de los jueces salteños respecto a los torneos grandes del fútbol argentino, entre otros temas. Marconi se recibió de abogado a los 22 años y a los 28 empezó como referí en los torneos de AFA.
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Un 22 de diciembre de 1987 se creaba el Sindicato de Arbitros Deportivos de la República Argentina (Sadra) con el doctor Guillermo Marconi como si titular. El exárbitro y periodista llegó el miércoles pasado a Salta para festejar los 25 años de vida sindical con la seccional de esta provincia, una de las mejores constituidas de las 21 que hay a lo largo de todo el país.
“La seccional y la gente de Salta me hacen sentir siempre muy bien. Entre mis ocupaciones como árbitro, abogado y la política he recorrido el país entero; pero Salta es un lugar especial no solo por la gente que trabaja sino por la seccional que hay, trabajan muy bien y tienen un mérito importante que me hace sentir mejor”, sostuvo Marconi.
En su paso por la provincia dialogó con El Tribuno sobre la conquista de los árbitros del interior por sobre la capital y las posibilidades de los jueces salteños respecto a los torneos grandes del fútbol argentino, entre otros temas. Marconi se recibió de abogado a los 22 años y a los 28 empezó como referí en los torneos de AFA.
¿Cuál sería el mensaje para la gente y los árbitros?
Lucha, lucha y lucha. Un ejemplo claro de esto es que le ganamos a la capital, dame otro ejemplo en la historia donde el interior le haya ganado a la capital. No se trata solo de haberlo conquistado, sino de mantenerlo. Cuando digo esto de la lucha es pelear por mantener lo que se consiguió porque hay muchos que están a la espera para rapiñar lo que se consiguió.
¿Qué análisis o perspectiva podría hacer de los árbitros salteños?
La frutilla de la torta sería que lleguen al Nacional B o Primera División. En Salta el hombre ideal era Gustavo Fabián pero como la FIFA bajó siete años el límite de edad y mató a los árbitros, complicó no solo a Fabián sino a muchos árbitros en Argentina y todo el mundo.
¿Y cómo queda la situación de Fabián?
Esto no quiere decir que no sea un árbitro de absoluta confiabilidad. Es de los árbitros grandes del interior que se mantiene junto a tres o cuatro más y es considerado para todos los partidos fundamentales de los campeonatos que dirige. De no haber sido por la edad, sería un árbitro para Primera División sin dudas.
¿Y Federico Guaymás Tornero?
Es el que está en punta. Salta tiene cuatro contratos y los mantiene, que es gran un mérito, y Guaymás es el que está arriba. Está dentro de un grupo de cinco o seis del Argentino A que tiene proyección hacia los torneos de la máxima categoría.
¿Cuáles fueron las conquistas del Sadra?
Logramos que le devuelvan al interior lo que le pertenecía, las 220 ligas que los árbitros locales dirigían hasta las finales y después, para la final, llamaban a árbitros de capital y le pagaban diez veces más. Se comían la frutilla de la torta. Eso se terminó, en las ligas dirigen sus propios árbitros. Después el tema pasó indudablemente a la conquista total del interior a través del Torneo del Interior, del Argentino que se dividió en A y B. Todo eso lo logramos nosotros promoviendo una cantidad importante de partidos. Luego las reivindicaciones siguieron con un árbitro en el Nacional B, en primera y en torneos internacionales.
Objetivo cumplido, ¿y ahora?
Los objetivos se cumplieron, hoy tenemos un árbitro internacional más que otros gremios, un desarrollo institucional con edificio propio, 21 seccionales en todo el país y una obra social modelo con lo que hemos llegado al techo. Hay cosas que se piensan, se planifican y se programan, y nosotros en esa planificación que hicimos y el programa gremial que tenemos se alcanzó. Ahora vienen otros 25 años más de mantenerlo. Se pueden acumular muchas conquistas pero si no las cuidas las terminás perdiendo rápidamente.
¿Existe algún tipo de comparación con la Asociación Argentina de Arbitros?
No, nos comparamos con la Asociación, son 300 árbitros; es muy chica. Nosotros somos 12.000 que nucleamos a árbitros de distintas actividades deportivas. Ellos nuclean a un sector de capital y solo del fútbol; nosotros tenemos vóley, básquet, tenis, todas las actividades arbitrales.
En estos 25 años, ¿cuáles son las autocríticas?
No quiero pecar de soberbio porque no lo soy, tampoco soy humilde pero analizo las cosas fríamente. La verdad no se me ocurre ninguna, no hemos perdido nada pero porque las conquistas que conseguimos fueron muy fuertes y muy sólidos los fundamentos para lograrlas.
Entonces, ¿qué les falta lograr?
Sin ser un tema gremial, lo que nos falta son los sorteos. Para los partidos los árbitros tienen que ir a sorteo, sino se manosea el juego arbitral más en épocas como abril o mayo donde se define todo.
¿Qué árbitros podrán ir al próximo Mundial?
Creo que Pitana o Laverni son los candidatos, pero hay operaciones que están en contra. Porque la corporación familiar impone nombres determinados, sus hijos, abruptamente. Los tienen que sacar maduros, y los sacan verdes después pasa lo que pasa en la cancha.
¿Son errores del Colegio de Arbitros?
Son los responsables. Cuando Romo (Jorge, exdirector del Colegio de Arbitros), que ya se fue, designó a Brazenas para el partido de Vélez y Huracán, nosotros lo cuestionamos duramente. A Brazenas le costó el puesto. Ahora insisten en la designación de Abal (Diego) cuando está demostrado que no está capacitado para dirigir un Mundial y no hoy nada personal en contra de Abal. Ahora lo citan para una reunión en Portugal de perfeccionamiento, son lobbies contra quienes tenemos que pelear; hacerles frente.
¿Quién fue el mejor árbitro de la historia en Argentina?
Hay un hecho que es indudable, te guste o no; Horacio Elizondo protagonizó el episodio más importante del arbitraje argentino: dirigió seis partidos en el Mundial (Alemania 2006) y lo hizo de manera impecable. Nunca ningún árbitro dirigió más de cuatro partidos y él dirigió seis: el de la inauguración y el de la final, y lo hizo con un desarrollo impecable. Para mí, el mejor árbitro de todas las historias de los mundiales fue Elizondo, no tengo dudas. No hubo otro ni acá ni en otra parte del mundo que haya tenido una actuación así.
¿Y el peor?
No voy a decir quién es, pero sí es argentino y fue a un Mundial también. Es el hombre que retrasó todo el arbitraje argentino.
¿Por qué el arbitraje está en 7 puntos cuando siempre estuvo en 9?
Por un lado, por el cambio generacional, con una nueva camada de árbitros nuevos y, por otro, por el tema de los sorteos. Esto último abarca todo porque lo condiciona al árbitro, lo expone a críticas y a pedidos previos innecesarios; lo tironean antes y después del partido.
El sorteo limpia, transparenta. El árbitro que llega a Primera tiene que dirigir cualquier cosa, y sino puede es porque se equivocaron en subirlo a Primera. En este caso hay que sacarlo al que lo designó y al que dirige mal.
¿Cómo hay que hacer para que el arbitraje sea menos corruptible?
Tener el control. Yo sé cómo viven todos mis árbitros, me refiero a los de primer nivel porque son 12.000 árbitros. Pero cuando llegan elementos para hacer una denuncia, lo hice.
¿En su época de árbitro, le tocó vivir de cerca un hecho de corrupción?
Jamás. Todos nos conocemos y saben lo que haría si me insinúan algo en tono menor; inmediatamente saben lo que pasaría. Como cuando me enteré lo de Tucumán, analice cómo eran los hechos e hice la denuncia correspondiente (fueron cuatro árbitros denunciados y uno reconoció el error).
¿Cómo analiza el accionar de Javier Cantero, presidente de Independiente, en contra de los barras?
Me parece un tipo muy valiente, pero tiene que darse cuenta que él ya rotuló el tema, le dijo no al los barrabravas. Pero no puede ponerse al frente de una campaña nacional porque no tiene personería: ya depende de las autoridades municipales, provinciales y nacionales. Además, tiene que atender una deuda de 320 millones de pesos que dejó la gestión anterior y la situación de un equipo que hoy está en descenso.
¿El tema violencia pasa por una decisión política?
Es una decisión política. Por eso cuando la ministra futbolera de ustedes, María Silvia Pace, de Derechos Humanos, me planteo el tema de la violencia y hacer algo en la provincia está totalmente en lo cierto, el tema es que no termine siendo retórico.