Siete presos federales alojados en la unidad carcelaria de Gral. Güemes, mantienen una huelga de hambre desde el pasado lunes 28 de Mayo. La medida la iniciaron 12 presos en reclamo por la demora en la definición a sus causas. De acuerdo a lo informado en esa oportunidad por Miguel G. uno de los huelguistas, las sentencias aplicadas a cada uno de ellos, fueron apeladas y la ley estipula un tiempo no mayor a tres meses para resolver la apelación, sin embargo ese tiempo ya habría sido duplicado sin que las causas se hayan movido de los escritorios, “creemos que las están cajoneando, esta espera es insoportable, hay mucha incertidumbre, por esa razón adoptamos esta medida extrema, nos es contra el servicio penitenciario, estamos en nuestras celdas tranquilos sin consumir sólidos, por ahora solo agua, pero si en una semana no se resuelve nuestra situación, vamos a dejar de tomar agua, estamos dispuestos a ir hasta las últimas consecuencias” expresó el vocero de los detenidos federales.
Durante la semana anterior hubo solución para cinco de los huelguistas, los otros siete continúan con el reclamo. De acuerdo a lo anticipado, desde hoy, dejaron de consumir líquidos, según se pudo saber por familiares de los manifestantes, quienes están muy preocupados, no cuentan con atención médica, solo un enfermero les toma la presión, uno de ellos tiene problemas renales, todos se encuentras en sus celdas acostados y dispuestos a continuar con la protesta sin medir consecuencias.
Esta sería la segunda huelga de hambre en el servicio penitenciario federal realizada por los detenidos, a casi un año de su habilitación. La primera, tres semanas atrás, fue en protesta por la comida. La respuesta fue inmediata y positiva, ya que la calidad de la misma fue mejorada considerablemente.
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Siete presos federales alojados en la unidad carcelaria de Gral. Güemes, mantienen una huelga de hambre desde el pasado lunes 28 de Mayo. La medida la iniciaron 12 presos en reclamo por la demora en la definición a sus causas. De acuerdo a lo informado en esa oportunidad por Miguel G. uno de los huelguistas, las sentencias aplicadas a cada uno de ellos, fueron apeladas y la ley estipula un tiempo no mayor a tres meses para resolver la apelación, sin embargo ese tiempo ya habría sido duplicado sin que las causas se hayan movido de los escritorios, “creemos que las están cajoneando, esta espera es insoportable, hay mucha incertidumbre, por esa razón adoptamos esta medida extrema, nos es contra el servicio penitenciario, estamos en nuestras celdas tranquilos sin consumir sólidos, por ahora solo agua, pero si en una semana no se resuelve nuestra situación, vamos a dejar de tomar agua, estamos dispuestos a ir hasta las últimas consecuencias” expresó el vocero de los detenidos federales.
Durante la semana anterior hubo solución para cinco de los huelguistas, los otros siete continúan con el reclamo. De acuerdo a lo anticipado, desde hoy, dejaron de consumir líquidos, según se pudo saber por familiares de los manifestantes, quienes están muy preocupados, no cuentan con atención médica, solo un enfermero les toma la presión, uno de ellos tiene problemas renales, todos se encuentras en sus celdas acostados y dispuestos a continuar con la protesta sin medir consecuencias.
Esta sería la segunda huelga de hambre en el servicio penitenciario federal realizada por los detenidos, a casi un año de su habilitación. La primera, tres semanas atrás, fue en protesta por la comida. La respuesta fue inmediata y positiva, ya que la calidad de la misma fue mejorada considerablemente.