En un buen momento, los tenistas argentinos oriundos de Tandil siguen a paso firme en los Juegos Olímpicos de Londres. Juan Mónaco (Nº10 del mundo) superó ayer al belga David Goffin y accedió a la segunda ronda, donde hoy enfrentará al español Feliciano López. Por su parte, Juan Martín del Potro avanzó a los octavos de final luego de vencer al italiano Andrea Seppi. La mejor raqueta argentina, número 9 del ranking ATP, jugará mañana frente al francés Gilles Simons.
Del Potro derrotó a Seppi (28) por 6-3 y 7-6 (7-2) en el court central del All England Club, al cabo de una hora y 42 minutos; en tanto que Mónaco (10) hizo lo propio con Goffin (61) por 6-4 y 6-1 en la cancha número 1 tras una hora y 18 minutos.
Pico Mónaco buscará una nueva clasificación, por un lugar a los octavos de final, ante el español López (29), quien superó al ruso Dmitry Tursunov (141) por 6-7 (5-7), 6-2 y 9-7.
Mientras que el francés, nuevo rival de mañana de Delpo, dejó en el camino al búlgaro Grigor Dimitrov (53) por un doble 6-3, para ubicarse entre los mejores ocho del certamen.
Del Potro, que aseguró tras el partido que “ya le perdió el miedo al césped”, tuvo un comienzo adverso, porque Seppi le quebró el servicio en el primer juego, pero inmediatamente devolvió gentilezas y, tras levantar un 0-40, puso las cosas 1-1.
La Torre de Tandil, pese a ciertas imprecisiones desde la línea de fondo y sin ir demasiado a la red, mantuvo la superioridad sobre el italiano, ya que le volvió a quebrar el saque, se adelantó en el marcador por 4-1 y luego cerró el set por 6-3, en 41 minutos.
Gofin se sostuvo en el partido por el aliento del público, que se volcó a su favor, y porque supo además sacar provecho de los errores del tandilense, quien no pudo sostener el quiebre y cedió su saque para el 2-1.
Luego, ambos se quebraron el servicio sucesivamente hasta que el argentino pudo conservar el suyo para el 4-3.
Mónaco, pese a alternar resoluciones precisas con varios errores no forzados, demostró por qué es uno de los top-ten del momento y terminó quedándose con el primer set por 6-4, tras 40 minutos.
En el segundo parcial el tandilense ajustó detalles y, pese a que los juegos fueron muy cerrados, terminó demostrando el gran nivel que lo llevó hasta el décimo lugar del ranking para ganar por 6-1 en 38 minutos.
A pesar de que no hay mucho tiempo para los festejos, hoy el tenis nacional sigue firme gracias a los tandilenses. Ambos conservan intactas sus esperanzas de ganar alguna medalla.
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En un buen momento, los tenistas argentinos oriundos de Tandil siguen a paso firme en los Juegos Olímpicos de Londres. Juan Mónaco (Nº10 del mundo) superó ayer al belga David Goffin y accedió a la segunda ronda, donde hoy enfrentará al español Feliciano López. Por su parte, Juan Martín del Potro avanzó a los octavos de final luego de vencer al italiano Andrea Seppi. La mejor raqueta argentina, número 9 del ranking ATP, jugará mañana frente al francés Gilles Simons.
Del Potro derrotó a Seppi (28) por 6-3 y 7-6 (7-2) en el court central del All England Club, al cabo de una hora y 42 minutos; en tanto que Mónaco (10) hizo lo propio con Goffin (61) por 6-4 y 6-1 en la cancha número 1 tras una hora y 18 minutos.
Pico Mónaco buscará una nueva clasificación, por un lugar a los octavos de final, ante el español López (29), quien superó al ruso Dmitry Tursunov (141) por 6-7 (5-7), 6-2 y 9-7.
Mientras que el francés, nuevo rival de mañana de Delpo, dejó en el camino al búlgaro Grigor Dimitrov (53) por un doble 6-3, para ubicarse entre los mejores ocho del certamen.
Del Potro, que aseguró tras el partido que “ya le perdió el miedo al césped”, tuvo un comienzo adverso, porque Seppi le quebró el servicio en el primer juego, pero inmediatamente devolvió gentilezas y, tras levantar un 0-40, puso las cosas 1-1.
La Torre de Tandil, pese a ciertas imprecisiones desde la línea de fondo y sin ir demasiado a la red, mantuvo la superioridad sobre el italiano, ya que le volvió a quebrar el saque, se adelantó en el marcador por 4-1 y luego cerró el set por 6-3, en 41 minutos.
Gofin se sostuvo en el partido por el aliento del público, que se volcó a su favor, y porque supo además sacar provecho de los errores del tandilense, quien no pudo sostener el quiebre y cedió su saque para el 2-1.
Luego, ambos se quebraron el servicio sucesivamente hasta que el argentino pudo conservar el suyo para el 4-3.
Mónaco, pese a alternar resoluciones precisas con varios errores no forzados, demostró por qué es uno de los top-ten del momento y terminó quedándose con el primer set por 6-4, tras 40 minutos.
En el segundo parcial el tandilense ajustó detalles y, pese a que los juegos fueron muy cerrados, terminó demostrando el gran nivel que lo llevó hasta el décimo lugar del ranking para ganar por 6-1 en 38 minutos.
A pesar de que no hay mucho tiempo para los festejos, hoy el tenis nacional sigue firme gracias a los tandilenses. Ambos conservan intactas sus esperanzas de ganar alguna medalla.
Federer, sin despeinarse
Roger Federer, el número uno del tenis mundial, diseñó un claro triunfo sobre el francés Julien Benneteau, en un resultado que no solo le permitió acceder a los octavos de final de los Juegos Olímpicos sino también fortalecer el idilio que mantiene con el público londinense, que lo elevó a la categoría de favorito.
En el court central del complejo del All England Tennis Club de Wimbledon, Federer, oro en Beijing 2008 pero en dobles, no pasó apremios (como sí los había tenido en el partido de la primera vuelta con el colombiano Alejandro Falla) y batió a Benneteau (32) por un doble 6-2, tras apenas 58 minutos de juego.
Justamente, ante su rival de ayer, el suizo tenía un antecedente reciente completamente diferente, ya que hace dos semanas, también en el All England Club y por los 32vos. de final del Grand Slam de Wimbledon, debió batallar a lo largo de cinco sets para ganarle finalmente por 4-6, 6-7 (3/7), 6-2, 7-6 (8/6) y 6-1.
El próximo rival del reciente ganador de su séptimo Wimbledon, el tercer Grand Slam de la temporada, será quien triunfe entre el luxemburgués Gilles Muller (56) y el uzbeco Denis Istomin (34).
Lo cierto es que Federer continúa cautivando no solo a la prensa que se concentra en la cobertura de esta cita olímpica sino también al denominador común del público inglés, que ayer agotó las 12 mil localidades disponibles del court central (el único que tiene techo corredizo en caso de lluvia) para verlo jugar.
Desde temprano, los trenes de la District Line (una de las tantas redes ferroviarias de la capital británica) iban cargados hacia la estación Southfields, cercana a la ubicación del tradicional complejo del tenis inglés.
Público local, turistas (mayoría de asiáticos) y periodistas pugnaban por una localidad para disfrutar de la calidad del tenista que dominó ampliamente durante la última década.
Y una vez que completó su faena, la mayoría del público abandonó las instalaciones de la cancha principal del complejo y dejó a la mitad la capacidad, justo antes de que Juan Martín Del Potro comenzara su encuentro con el italiano Andreas Seppi, encuentro que ganó el de Tandil.