Con el fin de evitar que los vendedores ambulantes perjudiquen a los comerciantes de las peatonales Florida y Alberdi, el concejal del partido Salta Somos Todos, Carlos Zapata, presentó en el Concejo Deliberante un proyecto que busca eximirlos del pago de la tasa de Inspección, Higiene y Salubridad.
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Con el fin de evitar que los vendedores ambulantes perjudiquen a los comerciantes de las peatonales Florida y Alberdi, el concejal del partido Salta Somos Todos, Carlos Zapata, presentó en el Concejo Deliberante un proyecto que busca eximirlos del pago de la tasa de Inspección, Higiene y Salubridad.
Polémica generará la llegada de este proyecto al recinto, porque se trata de una tasa que representa el 20% de la recaudación municipal.
La exención impositiva que plantea la medida es de carácter temporal, hasta que la Municipalidad de Salta defina la reubicación de los vendedores ambulantes.
“La presencia de vendedores ambulantes en el espacio público es una contravención si no está autorizada por la Municipalidad. La falta de control municipal es evidente”, explicó a El Tribuno el autor de la iniciativa. Para Zapata, la presencia de los manteros genera una desigualdad ante la ley porque no pagan tributos, cuando el comerciante sí tiene que hacerlo.
El funcionario argumentó que “esto se traduce en un aumento de costos para los consumidores: cuando un local remarca los costos, lo hace conforme a sus gastos fijos y al margen de ganancias que estima obtener. Pero cuando se instala un vendedor en la vereda, el volumen de venta se reduce y aumenta sus márgenes porque vende menos. Paga el consumidor”.
El 80% de los vendedores ambulantes en la ciudad “ofrece productos de contrabando”, según afirmó el concejal capitalino Carlos Zapata.