Los cinemómetros ya están instalados en dos de las avenidas más transitadas de la ciudad: Bolivia y Banchik (ex Kennedy) y, pese a que ya están funcionando -a modo de prueba-, aún no se están labrando las multas a los conductores que circulan superando los límites de velocidad permitidos. Esas sanciones, informaron desde la Secretaría de Tránsito y Seguridad Vial de la Municipalidad, comenzarán a aplicarse recién en un plazo estimativo de 30 días. Antes, comentaron, es preciso que en ambos puntos se coloque señalización indicando la velocidad permitida y que la zona está controlada por estos dispositivos.
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Los cinemómetros ya están instalados en dos de las avenidas más transitadas de la ciudad: Bolivia y Banchik (ex Kennedy) y, pese a que ya están funcionando -a modo de prueba-, aún no se están labrando las multas a los conductores que circulan superando los límites de velocidad permitidos. Esas sanciones, informaron desde la Secretaría de Tránsito y Seguridad Vial de la Municipalidad, comenzarán a aplicarse recién en un plazo estimativo de 30 días. Antes, comentaron, es preciso que en ambos puntos se coloque señalización indicando la velocidad permitida y que la zona está controlada por estos dispositivos.
Los datos, a priori, son más que elocuentes. En un período de 15 días de prueba de los cinemómetros se registraron más de 32 mil vehículos circulando a velocidades que exceden la permitida (60 kilómetros por hora en la avenida Banchik y 80 kilómetros por hora en la Bolivia).
De ese total, son 622 los conductores que circularon entre 120 y 165 kilómetros por hora. “Es realmente preocupante, sobre todo si nos ponemos a pensar que a 60 kilómetros por hora un accidente ya puede ser fatal”, dijo Emilce Aramayo, desde el sector de prensa de la Secretaría de Tránsito y Seguridad Vial de la comuna.
Los cinemómetros, aparte, controlarán que los conductores circulen con la luz baja encendida.
Estos dispositivos cuentan con espigas sobre el pavimento que detectan a los vehículos que circulan a alta velocidad y dos cámaras: una toma una fotografía a todos los vehículos, para depurar cuáles andan con la luz baja encendida y cuáles no, y la otra que fotografía a aquellos vehículos que superan los límites de velocidad.
Semáforos inteligentes
Respecto a los semáforos inteligentes, desde la Secretaría comunicaron que se estima que empiecen a funcionar a partir de octubre o noviembre. Se colocarán, en total, 49 de estos semáforos, en las avenidas Entre Ríos, Virrey Toledo y Belgrano.
Cuentan con sistema GPS que permite la utilización de su reloj patrón para sincronizar y coordinar todos los aparatos conforme a las necesidades del flujo vehicular. Se pueden sincronizar de dos formas: por día o por hora. Por ejemplo, si los domingos o lunes el flujo vehicular en esas arterias es menor, entonces se programarán los semáforos para que los cambios sean a un determinado ritmo y si en el horario de 7 a 9, o de 17 a 19, el flujo vehicular es mayor, se dará otra frecuencia al cambio de luces (entre el rojo, amarillo y verde). Además, los aparatos podrán ser monitoreados por operadores ubicados en el Centro de Comando que se construirá en el Centro Cívico Municipal y donde habrá controles que permitirán ver al momento el flujo vehicular en cualquiera de esas avenidas y desde allí cambiar la frecuencia ante una emergencia o un código rojo de circulación.
“Se los ubicó en zonas clave”
“Como toda medida nueva, siempre tiene sus cuestionamientos”, dijo el secretario de Tránsito y Seguridad Vial, Carlos Caruso, al ser consultado sobre la opinión de los conductores ante los cinemómetros. En este sentido el funcionario afirmó que lo primero que se criticó la ubicación de los aparatos (avenidas Bolivia y Banchik). “La decisión obedece a que, según las estadísticas, allí se produjo la mayoría de los accidentes en la ciudad. Se las transita como si fueran rutas y los conductores se olvidan de que se trata de avenidas, que tienen un límite de velocidad de 60 kilómetros por hora”, dijo Caruso. Agregó que, incluso, se detectaron casos de vehículos que superaron los 160 km por hora.
Por otra parte, el secretario de Tránsito afirmó que cuando comiencen a llegar las multas las cifras de infractores seguramente van a bajar; puso como ejemplo el uso del casco en los motociclistas: Primero hubo una resistencia a su uso, pero posteriormente, cuando se tomaron las medidas estipuladas su uso comenzó a generalizarse.