Pasaron más de cuatro años y cinco meses de la misteriosa muerte de la joven Sabrina Berton (17) y la causa estuvo a punto de prescribir, aunque ayer hubo novedades en la Ciudad Judicial y el caso amenaza con dar un giro rotundo.
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Pasaron más de cuatro años y cinco meses de la misteriosa muerte de la joven Sabrina Berton (17) y la causa estuvo a punto de prescribir, aunque ayer hubo novedades en la Ciudad Judicial y el caso amenaza con dar un giro rotundo.
Es que en las últimas horas se conoció que una de las tres armas, de calibre 22, secuestradas tras el fatídico hecho ocurrido el 14 de marzo de 2008 en el microcentro capitalino, fue peritada por el Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) con la bala hallada en el cuerpo de la víctima y dio positivo, por lo que la causa, caratulada durante más de cuatro años como “homicidio culposo”, podría pasar a “homicidio simple”, si es que el juez a cargo del caso, Esteban Dubois, titular del Juzgado de Instrucción Formal 2, así lo dispone.
De esta manera, los cinco imputados, identificados como Aldana Leyseca, Ignacio Agüero, Juan Ignacio Córdoba, Daniel Burgos y Roberto Fuentes, que actualmente se encuentran en libertad, volverían a ser indagados por el magistrado y hasta podrían volver a prisión, según indicaron fuentes extrajudiciales.
Cabe recordar que el homicidio de la joven se produjo el mencionado día, a las 20.45, en la intersección de la calle 25 de Mayo y avenida Belgrano, cuando un grupo de barrabravas del club Central Norte -que integraba la chica- se dirigía al estadio de Gimnasia y Tiro para presenciar un clásico entre ambos clubes, cuando un disparo efectuado por Aldana hirió y luego mató a Berton, que formaba parte del grupo.
La causa, que estuvo dormida periodísticamente, volvió con todos sus fueros a una etapa investigativa intensa y ahora se intenta establecer si el disparo fue ocasionado accidentalmente como se pensaba o si se trató de un asesinato programado por la otra joven, hipótesis que toma fuerza ya que los peritajes aducen que el disparo se hizo a menos de 70 centímetros de la cabeza de la muchacha, lo que comprobaría un hecho intencional.
Fuentes judiciales confirmaron a El Tribuno que en las próximas horas, el magistrado se reunirá con los autores de la pericia con la finalidad de conocer más detalles del estudio.
El propietario del arma
Tras el peritaje de la pistola, la principal búsqueda pasará ahora por dar con el titular de la misma, quien podría quedar involucrado en el homicidio.
A punto de ser archivada
Días antes de que la causa sea archivada, Dubois retomó la investigación, en septiembre del año pasado, por decisión de la Corte Suprema de Justicia, al hacer lugar a un recurso de casación.
A principios de este año, se ordenó peritar tres pistolas secuestradas por el hecho y una de ellas dio positivo en las últimas horas, por lo que el cambio de carátula sería inminente, según expertos judiciales.
Un informe clave
Menos de 24 horas después de la muerte de Sabrina Berton (17), fallecida a causa de un disparo en la cabeza, el arma homicida volvió a estar en otro hecho delictivo: dos personas encañonaron a un remisero en la zona oeste de esta ciudad.
El dato le llegó a la madre de la víctima, Roxana Belbruno en la red social que creó tras la muerte de su hija y ella se contactó con el personal de la Brigada de Investigaciones.
De esta manera, la pistola, calibre 22, pasó a disponibilidad de la Justicia para ser peritada, hecho que sucedió en las últimas horas y cuyo resultado fue positivo.
“Estoy viva solo por mi hija”
Su rostro está marcado por el dolor, esa angustia insuperable de la pérdida de una hija. Pero, de igual manera, la docente Roxana Belbruno se mantiene firme y cree ser lo suficientemente fuerte para exigir Justicia por el homicidio de Sabrina, hasta que esto suceda.
En diálogo con El Tribuno, la mujer aseguró: “Estoy viva solo por mi hija y si bien la coartada de los imputados estaba saliendo a la perfección durante este tiempo, ellos no contaron con que iba a estar yo al frente”.
“No pueden decir que se trató de un accidente, porque a Sabrina le apuntaron a 70 centímetros de su rostro y le dispararon, por eso me quise morir cuando dos meses después de su asesinato, me enteré de que el juez (Esteban Dubois) había cambiado la carátula y la causa se manejó como homicidio culposo, un delito excarcelable”, dijo Belbruno.
“Tuve que aprender muchas leyes y el expediente es mi material de lectura frecuente. Contraté peritos e investigadores. Tengo una base de datos sobre los imputados y trato de que ningún detalle se me escape”, comentó.
Por último, la mujer hizo mención a integrantes de la barra brava del club Central Norte, que se encuentran implicados en el hecho: “Hay una protección muy grande hacia los barras y el mensaje que la Justicia les dio tras la muerte de Sabrina es: ‘Lleven armas a los estadios, es común para las personas que tienen pasión’. Ojalá que esto se revierta tras el hallazgo del arma homicida y el caso de mi hija sea el puntapié inicial para acabar con los violentos que le hacen mal al deporte y a la sociedad en general”, cerró.