Recientemente un informe de la CAME (Confederación Argentina de la Mediana Empresa) puso en el tapete el problema que hoy enfrentan las economías de la mayoría de las provincias y cuyo epicentro se nota en la perdida de rentabilidad, golpeadas por el incremento de los costos internos y la persistencia de un tipo de cambio desfasado. La queja fue planteada por 227 entidades del interior del país que integran la cámara empresaria. En esa misma sintonía, frente a un cuadro de situación complicado y en procura de revertir el panorama, las provincias de Catamarca y La Rioja iniciaron una ronda de diálogo para conformar el mercado común del noroeste, una expresión de deseo que es acompañada por otras provincias, Salta entre ellas. Sin dudas que las provincias, por distintas cuestiones, enfrentaron un primer semestre estancado con pronóstico reservado de aquí hasta fin de año.
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Recientemente un informe de la CAME (Confederación Argentina de la Mediana Empresa) puso en el tapete el problema que hoy enfrentan las economías de la mayoría de las provincias y cuyo epicentro se nota en la perdida de rentabilidad, golpeadas por el incremento de los costos internos y la persistencia de un tipo de cambio desfasado. La queja fue planteada por 227 entidades del interior del país que integran la cámara empresaria. En esa misma sintonía, frente a un cuadro de situación complicado y en procura de revertir el panorama, las provincias de Catamarca y La Rioja iniciaron una ronda de diálogo para conformar el mercado común del noroeste, una expresión de deseo que es acompañada por otras provincias, Salta entre ellas. Sin dudas que las provincias, por distintas cuestiones, enfrentaron un primer semestre estancado con pronóstico reservado de aquí hasta fin de año.
Un estudio del IERAL (Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana), que depende de la Fundación Mediterránea, destaca que en el análisis sobre el panorama provincial sobresalen fuerzas contrapuestas, porque el gobierno nacional ha seguido empujando con un mayor gasto público y mayor emisión de dinero, empuje que se ha visto compensado con una retracción privada en dónde se nota menor consumo y problemas para exportar.
La investigación se basa en el Monitor de Provincias, que agrupa una serie de indicadores indirectos de producción y otros de ventas y de capacidad de compra. En ese contexto en la región del Noroeste Argentino (NOA), la disminución de actividad resulta menor que el promedio nacional, destacando que Salta, muestra un mejor desempeño, especialmente en ventas de supermercados, autos y combustibles. Otras provincias con variación positiva del nivel de actividad estimado se encuentran Formosa, Corrientes, San Juan y Santa Cruz.
Las provincias grandes fueron las más afectadas, con números rojos en el segundo trimestre, caso de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Mendoza, curiosamente varias de ellas, grandes productoras sojeras.
Por último, el Sur “sigue la tendencia nacional”, salvo por Santa Cruz, con mayor consumo de combustible y de electricidad, así como también mejoran sus regalías
Los indicadores no muestran un comportamiento homogéneo. De cara al futuro inmediato, entre otros factores que complican la recuperación se tienen: fragilidad fiscal y problemas de competitividad por el desfase de tipo de cambio y costos internos. La menor actividad se nota sólo en algunas variables (no en todas).
Unos indicadores suben (aunque a menor ritmo) y otros caen, destacando que en la mayoría de las provincias, la menor actividad se ha notado en pocas variables claves. Ha habido una disminución en ventas de combustibles y de autos y en volúmenes vendidos en supermercados. Además los depósitos y las transferencias de fondos nacionales aumentaron a menor ritmo que la inflación.
En ese escenario, la mayoría de las jurisdicciones ha experimentado un pobre segundo trimestre, con comportamiento no uniforme en sus indicadores de actividad. Pensando en el futuro, pocas jurisdicciones tienen posibilidades de contar con un impulso local, puesto que en la mayoría se han complicado sus finanzas gubernamentales. Ello implica que se ven obligadas a mejorar su recaudación impositiva y a moderar su gasto público, afectando así la actividad económica.
El Monitor que mide datos del consumo
El Monitor de Provincias del Ieral que mide fundamentalmente datos de consumo reveló para el distrito mediterráneo un descenso superior al 4%, empeorando por poco la performance de Santa Fe (4%) y Entre Ríos (3%). En tanto, las otras que muestran cifras peores que el promedio nacional (2%) son Chaco, Mendoza, Neuquén, Río Negro y Tierra del Fuego.
En total, 19 de las 24 jurisdicciones subnacionales exhiben números negativos. El top five de las de mejor desempeño lo integran Formosa (8%), Santa Cruz (4%), Corrientes (3%), Salta (1%) y San Juan (0,2%).
Para el Ieral, es “llamativa la disminución de actividad en las provincias grandes, que se hallan en una región eminentemente sojera, con precios internacionales interesantes. Acorde a especialistas, ese precio ha llegado un poco tarde, con cosecha vendida a precios menores, agregando que además la campaña fue mala en volúmenes. Un punto clave de la menor actividad está en otro sector, el automotriz, que padeció la debilidad de la demanda brasileña, lo cual se tradujo en menor producción, analiza el estudio.
Durante el período de auge 2003-2008, todos los indicadores de actividad incluidos en el Monitor crecían y a fuerte ritmo. Por su parte durante la crisis internacional 2008-2009, la tendencia se revertía en la mayoría de esos indicadores. En cambio, actualmente -destaca el estudio- estamos en un período sin una tendencia definida, con comportamientos dispares en materia de actividad. En la región cuyana, Mendoza presenta un similar comportamiento que las provincias grandes. En cambio, en San Juan sólo tiene indicadores negativos en gas y demanda eléctrica (además de las transferencias automáticas de fondos por parte de la Nación). En esta comparación inter-provincial, otro indicador relevante es el despacho de cemento, vinculado a la actividad constructora.