Los antecedentes en la proyección histórica inmediata de Gimnasia y Tiro son un atenuante de cara al complicado fin de año que tendrá el equipo ahora dirigido por Salvador Ragusa. El millonario no pudo salir de la penúltima posición tras el pobre empate sin goles de local ante Guaraní Antonio Franco. Y para lograr el cometido de levantar cabeza y comenzar a respirar, ante el acecho de Central Norte (es el último de la tabla, que con una victoria el viernes ante Chaco For Ever igualaría a Gimnasia), los dirigidos por el Ragusa deberán vencer el estigma que los viene atormentando desde hace tiempo (la flojísima productividad fuera de casa). En lo que va de 2013 el albo disputó 45 puntos en condición de visitante, de los cuáles apenas logró la magra cosecha de 11 unidades, producto de dos victorias (ante San Martín en La Ciudadela y Rivadavia, en Lincoln, ambos por la ronda final del torneo pasado), cinco empates y ocho derrotas; es decir, con un coeficiente por debajo del 25 por ciento de efectividad.
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Los antecedentes en la proyección histórica inmediata de Gimnasia y Tiro son un atenuante de cara al complicado fin de año que tendrá el equipo ahora dirigido por Salvador Ragusa. El millonario no pudo salir de la penúltima posición tras el pobre empate sin goles de local ante Guaraní Antonio Franco. Y para lograr el cometido de levantar cabeza y comenzar a respirar, ante el acecho de Central Norte (es el último de la tabla, que con una victoria el viernes ante Chaco For Ever igualaría a Gimnasia), los dirigidos por el Ragusa deberán vencer el estigma que los viene atormentando desde hace tiempo (la flojísima productividad fuera de casa). En lo que va de 2013 el albo disputó 45 puntos en condición de visitante, de los cuáles apenas logró la magra cosecha de 11 unidades, producto de dos victorias (ante San Martín en La Ciudadela y Rivadavia, en Lincoln, ambos por la ronda final del torneo pasado), cinco empates y ocho derrotas; es decir, con un coeficiente por debajo del 25 por ciento de efectividad.
Es hora de dar vuelta la página y en el horizonte del albo ahora aparecen cuatro encuentros al hilo fuera de los límites del Portezuelo: el miércoles 30 se cruzará otra vez en el camino de San Martín, en Tucumán; luego irá a la casa de Tiro Federal, en el complicado barrio Ludueña de Rosario (el domingo 3 de noviembre). Sin margen para el descanso, visitará otra vez el Alfredo Terrera para hacerle fuerza a Central Córdoba en el debut de la Copa Argentina (6 de noviembre) para luego finalizar la interminable gira por el interior del país en Concepción del Uruguay, Entre Ríos, donde medirá fuerzas con el que hoy lo acompaña en el penúltimo lugar, su homónimo Gimnasia (10 de noviembre). De yapa, una semana después recibirá a Juventud Antoniana en el Gigante.
El “1” y el armador
Las preocupaciones que se suscitaron en el regreso a los trabajos del plantel millonario tienen que ver con las lesiones del arquero Ernesto Hernández y del mediocampista Matías Ceballos. La recuperación del guardavallas uruguayo es la gran incógnita luego de quedarse afuera del once titular en el empate ante el franjeado de Misiones, y será evaluado en este prolongado margen de más de diez días sin competencia para determinar si podrá o no regresar ante el ciruja. En tanto, el volante creativo tiene líquido en una de sus rodillas y también preocupa al cuerpo técnico
Los albitos ganaron bajo la lupa del Profe
Bajo la atenta mirada del DT del plantel superior Salvador Ragusa y su flamante ayudante de campo Sergio Plaza, los pibes de Gimnasia y Tiro no tuvieron empacho paravencer a Deportivo Unión, por 3 a 1, en el encuentro que cerró ayer por la tarde en el Gigante del Norte la séptima fecha del decagonal final que hace disputar la Liga Salteña de Fútbol.
Tanto albos como verdolagas salieron a la cancha sin la “mochila” que los obligara a sumar puntos, dada la abismal diferencia que existe entre ambos con los puestos de vanguardia. Con esta victoria el albo alcanzó los 9 puntos, diez unidades menos que el único líder e invicto del reducido: San Antonio.
Con la mirada del cuerpo técnico del primer equipo, en el afán de seguir destacando y seleccionando juveniles para la primera división, los albitos no se pusieron colorados: Nicolás Zerda, Francisco Alderete y Franco Páez marcaron los goles para el albo, pero descontó sobre el final Imanol Chaves, en contra