Yesica Tamara Cabana es su nueva identidad desde septiembre pasado. Tiene 30 años y hace uno y medio que se operó. Cuando todavía era niño descubrió que quería ser mujer y recién a los 20 años se animó a gritar a los cuatro vientos lo que era. Yesica levantó anoche la bandera del orgullo y la diversidad LGBTIQ (Lésbico- Gay-Bisexual-Trans-Intersex-Queer) y marchó junto a sus pares por el centro de la ciudad.
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Yesica Tamara Cabana es su nueva identidad desde septiembre pasado. Tiene 30 años y hace uno y medio que se operó. Cuando todavía era niño descubrió que quería ser mujer y recién a los 20 años se animó a gritar a los cuatro vientos lo que era. Yesica levantó anoche la bandera del orgullo y la diversidad LGBTIQ (Lésbico- Gay-Bisexual-Trans-Intersex-Queer) y marchó junto a sus pares por el centro de la ciudad.
“Siempre participo de la marcha, es un momento muy esperado para mostrarnos más que nunca”, contó sonriente la joven amante de las artes plásticas. El vestuario atrevido, el brillo de las lentejuelas y del exagerado maquillaje fueron la nota de color que atenuaron la fría noche salteña.
Para ellas y ellos, según lo que siente cada uno, fue un día muy especial. En el marco de la semana de la Diversidad, reclamaron por una salud integral para personas trans, por la plena implementación de la Ley Nacional de Educación Sexual Integral y Laica, y por la elaboración de un Código Contravencional respetuoso de los Derechos Humanos.
También volvieron a insistir por la derogación de los artículos 74, 96, 114 y 115 del Código Contravencional de Salta, dado que por estos aseguran que son víctimas de atropellos de la policía. La inclusión laboral, la erradicación de la violencia institucional y el rechazo a la trata de personas completan los pedidos de reivindicaciones del sector.
Nicolás Hirtz, delegado del Inadi Salta, señaló que de acuerdo al último dato de hace un par de meses, por lo menos “25 parejas pudieron casarse. No era mucho, lo que significa que está bien. Es lo que nos pasa a cualquier hijo o hija de vecino. De todas maneras lo que genera la ley es que accedan al derecho de poder casarse y luego a los derechos de cualquier matrimonio”.
Señaló que en Salta unas 200 personas ya accedieron a su nuevo DNI. Se trata de un proceso largo, y que muchos tienen que pensar y repensar. Sobre la discriminación, Hirtz dijo que en la sociedad salteña es notable que hubo una apertura. “Hay otra visibilidad, está muy empoderado el colectivo del LGTB”, dijo.
Los roces y las divisiones entre dicha comunidad se evidenciaron con la gran ausencia de Mary Robles, quien encarará el próximo lunes otra marcha del orgullo LGTB. Con el tiempo frío se sintió bastante larga la caminata desde el Paseo Gemes hasta la plaza 9 de Julio. Por algunos minutos se cortó el paso por la avenida Bicentenario de Salta, la San Martín y luego por la calle Buenos Aires. Los transeúntes aprovecharon para sacar fotos y mirar el entretenido paisaje, y los automovilistas, se hicieron escuchar a los bocinazos.