El ‘Cyber Monday‘, el día en que las empresas de tecnología y las cadenas de venta de productos electrónicos a través de internet hacen descuentos, tuvo muchos adeptos y por ese motivo continuará una jornada más, más allá de las complicaciones que hubo, dado que colapsaron varios de los sitios web.
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El ‘Cyber Monday‘, el día en que las empresas de tecnología y las cadenas de venta de productos electrónicos a través de internet hacen descuentos, tuvo muchos adeptos y por ese motivo continuará una jornada más, más allá de las complicaciones que hubo, dado que colapsaron varios de los sitios web.
Este día particular, en el cual las empresas de tecnología y aquellos firmas que venden productos en negocio, apuestan por el comercio electrónico, tiene su origen en Estados Unidos y se replica por segundo año en Argentina, con bastante éxito.
En esta jornada de descuentos y promociones online, varias de las empresas ofrecieron sus productos con hasta un 50 por ciento menor de su valor original.
Desde esta madrugada los usuarios colapsaron las tiendas online de empresas de primer nombre buscando las ofertas, lo que produjo que varias de las páginas de internet colapsaran durante varios minutos.
Lo que señalaron los responsables del sector es que el tráfico de la red en este tipo de sitios se multiplicó por 20, y el sitio oficial de las ofertas -al que se debe ingresar mediante una registración- tuvo el año pasado 8.000 personas, pero en esta ocasión ese número ascendió a 80.000.
Por ese motivo es que varias de las marcas que se vieron gratamente sorprendidas con el resultado de la propuesta, estirarán la misma hasta mañana martes, en lo que sería un ‘Cyber Tuesday‘.
Desde la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), organismo que propone la jornada, anunció que en ese sentido los que se presentaron a la extensión de la propuesta están Falabella, Mercado Libre y Dafiti.
En la cadena de capitales chilenos, se indicó que en una hora vendieron lo que venden de manera online en un día, y los artículos más vendidos fueron televisores LED y equipos de aire acondicionado, aunque también hubo muebles y colchones.
Increíblemente, muchos de los artículos de electrónica se agotaron rápido, ya que la demanda superó de manera holgada la oferta, tendencia que podría repetirse mañana.