Alrededor de cuarenta vecinos del barrio Nuestra Señora de Luján cortaron ayer en horas de la mañana la intersección de las avenidas Artigas e Hipólito Yrigoyen. Los manifestantes -la mayoría mujeres y algunos niños- reclamaban la apertura de las calles del barrio y la conexión a la red de agua potable y cloacas.
Nuestra Señora de Luján está ubicado entre el barrio 9 de Julio y el predio de La Veloz del Norte, zona este de la ciudad, y hace cinco años comenzó como un asentamiento en el que actualmente viven 320 familias. Los vecinos contaron a El Tribuno que desde hace un año cuentan con el servicio de energía eléctrica, cuya obtención atribuyen a otro corte de calles que realizaron el año pasado.
Actualmente, para abastecerse de agua usan grifos comunitarios (de los cuales hay dos por cuadra). “Debemos recoger en tachos el agua y se corta todos los días, por eso muchos se levantan a las cinco de la mañana para juntarla. A veces se producen disputas entre vecinos porque todos quieren el agua”, cuenta María, una residente del barrio. “Estamos cansadísimos. Entre Tierra y Hábitat, Aguas del Norte y la Municipalidad se tiran la pelota. Tenemos un proyecto de ley para que el tendido se nos haga desde dos kilómetros abajo. Además Aguas del Norte decía que mandaba tres camiones cisterna con agua desde hace tres meses, pero nunca vinieron. Estamos sin agua totalmente”, agregó otra vecina llamada Estela.
“A veces no enviamos a los niños a la escuela porque no tenemos cómo higienizarlos. Cada tacho de agua de 5 litros nos sale de 15 a 20 pesos. Eso nos alcanza apenas para tomar y cocinar en el día”, especificó Patricia, otra manifestante.
Añadieron que habían presentado notas en la Cámara de Diputados y la Municipalidad, pero al no obtener respuestas se organizaron con bombos y carteles de protesta para ser escuchados por la Intendencia y Tierra y Hábitat. “Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias”, afirmó Patricia, apoyada por sus compañeras.
Por último anticiparon que de no solucionarse la situación, van a organizar sucesivos cortes y marchas.
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Alrededor de cuarenta vecinos del barrio Nuestra Señora de Luján cortaron ayer en horas de la mañana la intersección de las avenidas Artigas e Hipólito Yrigoyen. Los manifestantes -la mayoría mujeres y algunos niños- reclamaban la apertura de las calles del barrio y la conexión a la red de agua potable y cloacas.
Nuestra Señora de Luján está ubicado entre el barrio 9 de Julio y el predio de La Veloz del Norte, zona este de la ciudad, y hace cinco años comenzó como un asentamiento en el que actualmente viven 320 familias. Los vecinos contaron a El Tribuno que desde hace un año cuentan con el servicio de energía eléctrica, cuya obtención atribuyen a otro corte de calles que realizaron el año pasado.
Actualmente, para abastecerse de agua usan grifos comunitarios (de los cuales hay dos por cuadra). “Debemos recoger en tachos el agua y se corta todos los días, por eso muchos se levantan a las cinco de la mañana para juntarla. A veces se producen disputas entre vecinos porque todos quieren el agua”, cuenta María, una residente del barrio. “Estamos cansadísimos. Entre Tierra y Hábitat, Aguas del Norte y la Municipalidad se tiran la pelota. Tenemos un proyecto de ley para que el tendido se nos haga desde dos kilómetros abajo. Además Aguas del Norte decía que mandaba tres camiones cisterna con agua desde hace tres meses, pero nunca vinieron. Estamos sin agua totalmente”, agregó otra vecina llamada Estela.
“A veces no enviamos a los niños a la escuela porque no tenemos cómo higienizarlos. Cada tacho de agua de 5 litros nos sale de 15 a 20 pesos. Eso nos alcanza apenas para tomar y cocinar en el día”, especificó Patricia, otra manifestante.
Añadieron que habían presentado notas en la Cámara de Diputados y la Municipalidad, pero al no obtener respuestas se organizaron con bombos y carteles de protesta para ser escuchados por la Intendencia y Tierra y Hábitat. “Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias”, afirmó Patricia, apoyada por sus compañeras.
Por último anticiparon que de no solucionarse la situación, van a organizar sucesivos cortes y marchas.