Eran pocos, pero se hicieron sentir y ver. Aunque lejos en la geografía, el nombre de Argentina no resultó tan extraño. Seguramente, la inmensa mayoría de los holandeses no podrían precisar la ubicación de nuestro país en un planisferio, pero desde hace unos años saben que aquí nació esa cordial y simpática mujer que enamoró al príncipe Guillermo y que desde el martes es su nueva reina.
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Eran pocos, pero se hicieron sentir y ver. Aunque lejos en la geografía, el nombre de Argentina no resultó tan extraño. Seguramente, la inmensa mayoría de los holandeses no podrían precisar la ubicación de nuestro país en un planisferio, pero desde hace unos años saben que aquí nació esa cordial y simpática mujer que enamoró al príncipe Guillermo y que desde el martes es su nueva reina.
“Máxima, Máxima”, cuentan que gritaban no pocos privilegiados connacionales que pudieron levantar los colores celestes y blancos entre la multitud. Con banderas y pancartas, los argentinos sorprendieron a más de uno. Eran rápidamente reconocibles entre las decenas de miles de personas que participaron de la colorida fiesta callejera, organizada en la plaza Dam de Amsterdam para despedir el reinado de la reina Beatriz y saludar el de su primogénito Guillermo y Máxima, nuevos monarcas de Orange-Nassau.
Desde muy temprano, y sumándose a una decena de personas que pasó la noche en la plaza -histórico espacio que une el Palacio y la Nueva Iglesia- las columnas de entusiastas que llegaban desde las avenidas Damrak y DamStraat completaron el colorido cuadro popular, que llegó a sumar decenas de miles de personas. El grupo de argentinos, que se congregó en la red social Facebook durante las últimas semanas, fue de los primeros en llegar en la fría mañana que abrazó a la “ciudad de las bicicletas”, y ocupó uno de los primeros lugares tras el vallado, a unos 50 metros del balcón real.
Holandeses en Palermo
La Embajada de los Países Bajos en Argentina se sumó a los festejos por la investidura de Guillermo y Máxima como reyes de Holanda.
A las 7.30, la Embajada, la Cámara de Comercio Argentino-Holandesa, la Asociación Holandesa y la Asociación Holandesa de Beneficencia (AHB) ofrecieron a los residentes de esa comunidad un desayuno en los salones del Hipódromo de Palermo, donde transmitieron en pantalla gigante la abdicación de la reina Beatriz y, en directo, el acto de investidura Guillermo y Máxima.
La jornada terminó con la celebración de la tradicional “fiesta naranja”, organizada por la Asociación Holandesa en Argentina en una discoteca de San Telmo.