Con la intención de que los jugadores más chicos de Central Norte internalicen, a través de testimonios de deportistas consagrados, valores que contribuyan a su formación como jugadores, recibieron la visita de Juan “Chipi” Figallo.
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Con la intención de que los jugadores más chicos de Central Norte internalicen, a través de testimonios de deportistas consagrados, valores que contribuyan a su formación como jugadores, recibieron la visita de Juan “Chipi” Figallo.
El jugador salteño de Los Pumas les habló acerca de su carrera, del sacrificio que significó llegar a jugar a nivel nacional e internacional.
Los pibes del cuervo escucharon atentamente el testimonio del Chipi, más allá de no practicar el mismo deporte y luego interactuaron.
“El espíritu del deporte es el mismo en todas las disciplinas, el sacrificio y los valores tienen que ser los mismos”, comenzó su charla Figallo, quien también habló de su historia, esa que lo llevó a convertirse en uno de los mejores pilares a nivel internacional. “Cuando era chico estaba un poco gordito, bajé veinte kilos y me cuidé, dejando de lado algunas salidas con mis amigos: mi primer objetivo era claro, jugar en la primera división de mi club”, dijo.
Para el rugbier, la clave del progreso como deportista debe estar ligada a otro aspecto esencial. “Un buen jugador, del deporte que sea, siempre tiene que ser una buena persona, con valores. Eso te hace aún mejor jugador. Por eso ustedes tienen que aprovechar y adquirir los valores que les inculcan aquí y esforzarse mucho para poder llegar lejos”, les aconsejó Figallo a los chicos, que escucharon atentamente y con quienes luego interactuó.
En otra ocasión, los jugadores de las inferiores de Central Norte habían recibido la visita de Esteban “Bichi” Fuerte y la idea desde Aprocen, que nuclea el fútbol amateur del cuervo, es continuar acercándoles a los pibes testimonios de deportistas consagrados, contribuyendo a su formación como futuros jugadores profesionales.