En medio de una ovación y con cientos de personas viendo pasar el cortejo fúnebre, los restos del recordado boxeador José María “Mono” Gatica fueron recibidos en Villa Mercedes, San Luis, su ciudad natal.
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En medio de una ovación y con cientos de personas viendo pasar el cortejo fúnebre, los restos del recordado boxeador José María “Mono” Gatica fueron recibidos en Villa Mercedes, San Luis, su ciudad natal.
El recordado campeón argentino y sudamericano de los livianos, quien falleció a los 38 años en 1963, fue uno de los ídolos populares de su época, marcada por la pobreza, la miseria y la consagración.
Los restos de Gatica llegaron a la ciudad de Justo Daract y luego en caravana marcharon hacia Villa Mercedes, y arribaron al Palacio de los Deportes, donde permanecerán en vigilia aguardando los actos centrales de mañana. La caravana, custodiada por la Policía de la Provincia y por los Bomberos Voluntarios de El Fortín, cruzó la ciudad y sólo frenó frente a la casa natal del púgil.
El féretro fue colocados en un ring side en el Palacio Municipal de los Deportes, que en 1992 recibió su nombre, y el sábado al mediodía el féretro será colocado debajo de un imponente monumento de bronce sintético que representa al ídolo popular, en la entrada de la institución.
José María Gatica, al que se lo conocía como Mono, fue uno de los tantos ídolos populares del boxeo argentino, quien sin embargo no logró conseguir el título mundial. Ligado fuertemente a la figura de Juan Domingo Perón, Gatica fue conocido por llenar el mítico estadio Luna Park cada vez que se presentó allí, en particular con las tres peleas que protagonizó con Alfredo Prada.
Gatica falleció el 12 de noviembre de 1963, luego de las heridas recibidas tras ser atropellado por un colectivo de la línea 295, en el partido de Avellaneda, de donde regresaba a su casa al asistir a un partido de Independiente, donde vendía muñequitos de colores.